Surgen cuando ya somos adultos y ya no recordábamos la molestia que de niños sufrimos al salirnos los dientes. Suelen salir cuatro, pero a veces pueden salir dos o tres e incluso no salir. También es común que provoquen problemas de salud bucodental, desde apiñamientos a quistes, incluso infecciones y dolor. Es relativamente frecuente que el dentista nos aconseje retirarlas. A menudo es absolutamente necesario. Sobre las muelas del juicio, conocidas profesionalmente como el tercer molar, existen muchos mitos, y es el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Alicante (COEA) y el Consejo General de Dentistas de España, quien te ofrece realidades y consejos oficiales.

Desde que nacemos hasta que morimos, nuestra boca pasa por diferentes etapas de la erupción de los dientes. No hay dos dentaduras iguales y las matemáticas y los números exactos no sirven para medir el desarrollo de nuestra cavidad bucodental.

Los dientes de leche o temporales salen normalmente a partir de los seis meses de edad y su crecimiento suele durar hasta los dos años. Hasta los seis años no es frecuente que surjan las primeras muelas definitivas y los dientes permanentes terminan de erupcionar alrededor de los 12 años. Pero hay una excepción: los terceros molares, que suelen salir entre los 17 y los 22 años; de ahí que se les conozca popularmente como las muelas del juicio, porque ya aparecen a una edad de madurez.

¿Todo el mundo tiene muelas del juicio?

No. Un 10% de la población carece de muelas del juicio. Además, a una de cada cuatro personas les falta una o más de estos dientes. El 65% sí tiene cuatro muelas del juicio, dos arriba y dos abajo.

¿Por qué a algunas personas no les salen?

Existen diferentes teorías científicas sobre esta rareza. Aunque lo más habitual es tener cuatro muelas del juicio, hay personas que no tienen ninguna o les faltan. ¿Por qué? Buena parte de los investigadores concluyen que la carencia de este tercer molar tiene una relación directa con la evolución de la especia humana y de sus hábitos. Actualmente, nuestra dieta es menos carnívora, por lo que ya no son tan necesarias ni una mandíbula tan grande ni tantos dientes.

¿Menos mandíbula es sinónimo de menos muelas?

Según los expertos en evolución de la especie humana, sí. O más bien al contrario. Se necesitan menos dientes para el proceso de masticación y, por tanto, de menos mandíbula para alojarlos. Quizás por ello también se produzca uno de los principales problemas que se da cuando empiezan a salir las muelas del juicio.

Aunque lo más habitual es tener cuatro muelas del juicio, hay personas que no tienen ninguna o les faltan.

Falta de espacio

La malposición de la muela del juicio por falta de espacio es una de las patologías más frecuentes en torno a este tercer molar. Esta situación, a la hora de erupcionar, provoca distintos problemas. Por ello, el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Alicante recomienda que si existe molestia, dolor o algún cambio en nuestra boca cuando están saliendo las muelas del juicio, es preciso visitar a nuestro dentista cuanto antes.

El tiempo, en salud bucodental, es fundamental. Prevenir es curar y es anticiparse a las posibles y nada aconsejables complicaciones.

¿Qué problemas suelen causar las muelas del juicio?

En ocasiones, la posición de la muela del juicio o la falta de espacio originan una serie de problemas. El más común es la llamada pericoronaritis, una inflamación y/o infección de la mucosa que rodea la corona del tercer molar. Otras veces, puede originar un apiñamiento de los dientes, principalmente los incisivos, debido al empuje que puede generar la muela al no tener sitio suficiente para salir. También puede provocar un quiste dentro del hueso mandibular, que precisa de una intervención quirúrgica, o dañar la raíz del molar contiguo, produciéndole caries o reabsorbiendo su raíz. Por ello es tan importante acudir cuanto antes a nuestro dentista.

Problemas más frecuentes

Síntomas que pueden indicar problemas

Los signos que pueden indicar un problema en la erupción de las muelas del juicio son muy variables. Unas personas puede tener síntomas evidentes y otras no tanto, son muy distintos de un paciente a otro. Desde luego, dolor, molestia o cambios en nuestra boca, son signos que deben alertarnos y motivarnos a visitar cuanto antes a nuestro dentista.

Algunos de los síntomas más comunes son el hecho de sentir sensación de calor y empuje de los dientes. Una encía inflamada es señal de problemas. También, lógicamente, el dolor. En algunas ocasiones, éste se puede contagiar al oído y a la garganta. Por último, algunas personas sienten un cambio en el sabor de su boca y en su aliento.

Unas personas puede tener síntomas evidentes y otras no tanto.

¿Qué hacer? Solución

El Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Alicante recomienda, siempre, visitar al dentista si sentimos alguno de los síntomas anteriormente citados. El profesional sanitario será el que le indique el mejor tratamiento a iniciar.

¿Cuándo extraerlas?

Si bien es cierto que la extracción es uno de los tratamientos más indicados hoy en día, también lo es que no siempre es lo mejor.

Existen casos que se pueden resolver mediante tratamiento médico con antibióticos y antiinflamatorios aunque sí es cierto que, en otros pacientes, será necesario extraer la muela del juicio a través de cirugía.