Proyecto espacial

La misión Peregrino abandona su sueño de ir a la Luna y se resigna a estrellarse contra la Tierra

Tras analizar la anomalía en la nave, que en un primer momento no pudo orientarse correctamente hacia el sol y después sufrió una grave avería en los tanques de combustibles, los técnicos Astrobotic llegaron a la conclusión de que era imposible resolver la avería a distancia

El módulo Peregrine.

El módulo Peregrine. / EFE

Valentina Raffio

La misión espacial 'Peregrino' despegó hace justo diez días con la más alta de las ambiciones. Quería convertirse ni más ni menos que en el primer proyecto privado en aterrizar sobre el suelo lunar. Esta fue la motivación con la que arrancó el pasado 8 de enero. Pero tras un exitoso despegue, algo se torció. Los responsables de la misión, de la compañía Astrobotic, alertaron de una anomalía en la nave. Y poco después anunciaron que era imposible subsanarlo. Es así como, con cierta resignación, Peregrino ha tenido que abandonar su sueño de alcanzar la Luna y ahora se prepara para estrellarse contra la Tierra. Sus creadores estiman que el módulo espacial caerá sobre "una zona remota del Pacífico" durante la madrugada de este jueves.

La decisión fue tomada hace unos días por los responsables de la misión. Tras analizar la anomalía en la nave, que en un primer momento no pudo orientarse correctamente hacia el sol y después sufrió una grave avería en los tanques de combustibles, los técnicos Astrobotic llegaron a la conclusión de que era imposible resolver la avería a distancia. Sobre todo debido a las graves "fugas detectadas en el propulsor" de la nave espacial. Fue ahí cuando el sueño de Peregrino de alcanzar la Luna se esfumó del todo. 

El módulo caerá sobre una "remota zona del Pacífico" durante este jueves

Entonces llegó la decisión más difícil de todas. Los técnicos a cargo de esta misión estudiaron qué hacer con esta nave averiada y sin rumbo fijo. Hubo quien especuló, por ejemplo, con dejar que Peregrino flotara en el espacio hasta que, eventualmente, chocara contra la Luna. Pero tras un detenido análisis de las opciones, los técnicos decidieron que no era buena idea dejar a este módulo espacial flotando por el cosmos (sobre todo, para no acabar convirtiendo a este instrumento de dos metros en chatarra espacial). Así que finalmente se decidió estrellar la nave contra la Tierra como ocurre, por ejemplo, con las misiones espaciales que acaban su vida útil.

Instrumentos científicos y objetos simbólicos

El objetivo de Peregrino era desplegar un módulo de aterrizaje lunar de dos metros de altura por dos metros y medio de ancho en la superficie de la Luna. A diferencia de las misiones robóticas en Marte, como 'Perseverance' o 'Curiosity', este proyecto no tenía la intención de desplazarse por el suelo lunar, sino de poner en funcionamiento diversos instrumentos científicos para, por ejemplo, estudiar la atmósfera lunar, la composición del suelo y la radiactividad que afecta al satélite. La información recopilada por esta misión, según explican sus impulsores, serviría para comprender mejor las condiciones con las que tendrían que lidiar los futuros astronautas lunares.

La misión transportaba varios instrumentos científicos y objetos simbólicos de gran valor

Peregrino también tenía la intención de llevar sobre la superficie lunar varios "objetos simbólicos", como una cápsula del tiempo con mensajes de niños de todo el mundo, un "manual de la creatividad humana" con obras de arte, libros y música, y hasta un 'bitcoin lunar' desarrollado por una empresa de criptomonedas. Además, el módulo también transportaría las cenizas del autor de ciencia ficción Arthur C. Clarke y del creador de Star Trek, Gene Roddenberry, como parte del proyecto de las empresas Celestis y Elysium Space, que buscan establecer un negocio para "enviar restos de seres queridos al espacio" con el objetivo de que su memoria perdure por la eternidad. Todos estos objetos también acabarán estrellándose contra la Tierra este jueves.