La Policía ha detenido a 16 personas en una operación en la que ha desmantelado una casa de apuestas que organizaba multitudinarias peleas de gallos, previamente dopados para aumentar su agresividad, y a los que en ocasiones se les amputaba la cresta o se les implantaban espolones de acero o hueso.

Según ha informado la Policía, las peleas se celebraban en una nave de Castellón que contaba con una importante infraestructura con galleras, fichas de apuestas y ring para celebrar los combates, a los que podían asistir cerca de 100 personas y que, en ocasiones, no acababan hasta la muerte de uno de los animales.

Los gallos eran tratados con sustancias dopantes para encolerizarlos y sobreestimularlos durante la pelea y también recibían inyecciones posteriores para acelerar su recuperación.

En el operativo, en el que han participado 30 agentes, se han recuperado 24 animales y se han intervenido 52.000 euros en efectivo, fruto de las apuestas ilegales, en las que participaban personas llegadas desde Madrid, Alicante o Barcelona.

Para asistir a los combates, los organizadores obligaban a los espectadores a apostar una importante cantidad de dinero.

La redada de la Policía, en la que participaron una treintena de agentes, se produjo cuando se estaba celebrando una sesión de combates en la casa de apuestas ilegales. La Policía detuvo "in situ" a 16 personas, mientras que otras 85, que se encontraban realizando apuestas y presenciando el espectáculo, fueron propuestas para sanción administrativa por apostar ilegalmente.

De los 16 arrestados, 14 han sido detenidos como presuntos responsables de un delito contra la protección de la flora y la fauna.