La Audiencia de Alicante juzga desde ayer a dos mediadores de seguros y al propietario de un taller acusados de estafar a 70 personas en La Vila Joiosa al apropiarse del dinero que pagaron por unas pólizas suscritas para asegurar vehículos. Los seguros fueron anulados por las compañías al no recibir el dinero. El fiscal solicita en su escrito de conclusiones provisionales sendas penas de 6 años de prisión para los dos mediadores de seguros por falsedad, estafa y apropiación indebida, mientras que para el dueño del taller pide dos años de prisión. Las indemnizaciones que pide la Fiscalía suman unos 35.000 euros, aunque parte del dinero ha sido devuelto por un acusado.

El juicio, que se prolongará varios días, dio comienzo con la declaración de los tres acusados, uno de los cuales admitió su culpabilidad y reconoció que se quedó con el dinero de 41 clientes entre 2007 y 2011. Este procesado justificó su acción por los «problemas de adicción a las drogas» que tenía en aquella época y destacó que ya ha devuelto todo el dinero. Este mediador tenía su oficina dentro del taller cuyo propietario también está siendo juzgado y le exculpó al asegurar que no podía hacer seguros al no disponer de clave de mediador.

Según la acusación del fiscal, el presunto fraude que se enjuicia ocurrió entre 2007 y 2011, periodo en el que los mediadores acusados ofrecían a los clientes seguros para sus vehículos a buen precio y les pedían que la primera prima la abonasen en efectivo. Una vez recibido, el mediador se quedaba con el dinero, no lo abonaba a la compañía aseguradora y en la mayoría de los casos formalizaba la póliza poniendo como cuenta bancaria donde debían remitir los recibos una del procesado. Al carecer de fondos estas cuentas las aseguradoras no podían cobrar la prima y anulaban los seguros contratados.

Exjefe de la Policía Local

El dueño del taller está acusado de engañar al que fuera jefe de la Policía Local de La Vila con varios seguros para una motocicleta que según la acusación del fiscal nunca entraron en vigor. Sin embargo, este acusado negó ayer en el juicio que interviniera en el seguro del exjefe de la Policía Local y dijo que le sorprende que le denunciara porque tuvo que pagar 4.500 euros de la reparación de su moto por un accidente y el impuesto de un coche de importación.

El segundo mediador de seguros procesado que también se declaró ayer inocente explicó que tenía una cartera de 1.200 clientes y aseguró que las pólizas sí estaban dadas de alta pero la aseguradora no le dejó realizar la liquidación de los recibos pendientes a final de mes como solía hacer porque le «cerraron el ordenador».

El guardia civil que instruyó las diligencias elevó a 200 las víctimas de este presunto fraude y explicó que la investigación comenzó tras la denuncia del dueño de un coche al que dijeron los agentes de Tráfico que no tenía validez la póliza del seguro. La compañía informó al agente de que había sido anulada por falta de pago y cuando comenzaron a indagar comprobaron que uno de los ahora procesados ya había sido investigado por hechos similares.

El agente indicó asimismo que el «modus operandi» de los implicados era realizar una propuesta de póliza, quedarse el dinero y antes de ser anulada a los dos o tres meses hacían otra propuesta con otra aseguradora.