La Guardia Civil tiene perfectamente identificada y localizada en Elche a una ciudadana alemana que supuestamente sería la propietaria de los cuatro perros que el sábado fueron rescatados en la partida del Rebolledo enfermos y con signos evidentes de desatención. La actuación correspondería a la Policía Local.

Agentes de Seprona se desplazaron a principios de semana hasta la ciudad ilicitana donde esta mujer habría trasladado a los canes que tenía en el Rebolledo, excepto los cuatro que el sábado fueron recuperados por la Unidad de Protección Animal adscrita a la Policía Local de Alicante en un operativo impulsado por la concejala Marisol Moreno, uno de ellos en un lamentable estado que hace temer por su vida.

Agua y comida

El informe de los guardias civiles que inspeccionaron la nave de Elche recoge que además de los perros (cuatro boxers, dos bulldogs y otros diez cruzados) había cinco gatos. Agregan también que todos los canes presentaban buen estado, excepto uno que podría estar afectado de leishmaniosis, y que había comida en forma de pienso y agua.

Acerca de la salubridad del local, el informe precisa que no hay presencia de heces ni orines y que los perros están separados por una especie de jaulas.

A preguntas de los agentes, un familiar de la propietaria explicó que los animales eran suyos y que los tenía allí por temor a que los envenenaran frente al criterio de Moreno, que habla de un criadero ilegal.

Sin constancia de que se le preguntara por los cuatro perros del Rebolledo, los guardias reclamaron las cartillas sanitarias de los ubicados en Elche, de los que le faltaban más de la mitad. La mujer dispone ahora de diez días para presentarlas y demostrar que los animales son suyos.

Fuentes del Instituto Armado precisaron ayer que, a tenor de lo visto en Elche, no se han visto motivos para adoptar medidas contra esta mujer y que ahora están a la espera de que presente las cartillas sanitarias que faltaban.

El perro de los cuatro rescatados en Alicante que estaba en peor estado se encuentra estable dentro de la gravedad. Desde la Protectora de Alicante, donde está siendo atendido, explicaron que el animal ha comenzado a comer, lo que no es una mala noticia teniendo en cuenta que padece leishmaniosis en una fase avanzada y que sufre una delgadez extrema que le ha provocado un deterioro orgánico.

Numerosas llamadas

Desde que este diario informó del rescate de los animales y de su traslado a la Protectora, son numerosas las llamadas que se están recibiendo en este centro para interesarse por el estado del boxer. Su responsable, Raúl Mérida, se muestra más esperanzado que el primer día sobre la evolución del boxer aunque reconoce que es complicada su recuperación.