Camila recibió ayer el abrazo de despedida más grande y cálido posible. La ciudadanía de El Campello se volcó por completo en el acto de protesta y solidaridad que el Ayuntamiento había convocado con motivo del homicidio de la joven Camila, de 23 años. Según cifras municipales, en el encuentro estuvieron presentes más de 1.000 vecinos, quienes quisieron arropar a la familia con un minuto de silencio. La chica recibió el pasado viernes por la mañana tres puñaladas cuando iba de camino al instituto. El agresor era un hombre que al parecer sufría esquizofrenia y tiene un 30% de discapacidad. Se ha descartado, en principio, un móvil machista. Este homicidio deja dos niños sin madre y un profundo dolor entre sus familiares y amigos.

El momento era desolador. Por la mañana, y tras una convocatoria del Ayuntamiento y también por redes sociales, los padres de la joven se colocaban en el centro de la plaza junto al edificio consistorial, rodeados de cientos y cientos de personas que se extendían hasta las calles contiguas. Allí, el padre de la joven iniciaba un discurso de agradecimiento a los vecinos, que después trató de continuar la madre de la fallecida, aunque apenas pudo enlazar unas palabras que pronto fueron interrumpidas por el llanto y la desesperación más absoluta.

«Agradezco mucho el apoyo de que hayan venido a esta concentración», apuntó su padre momentos antes del minuto de silencio. «Se nos ha ido una persona que deja muchos recuerdos entre nosotros y la familia», lamentó el progenitor. Su madre, destrozada, recordó a su hija como una figura que le dará «mucho valor» para sacar adelante a sus dos pequeños, un niño y una niña. «No nos esperábamos esto. Es demasiado», añadió.

«Hay que trasladarles mucho ánimo, mucho soporte, y, en la medida de lo posible, atender a los padres», explicó ayer Juanjo Berenguer, alcalde de la localidad, en la plaza donde ha tenido lugar el encuentro. Berenguer aseguró que las instituciones «estarán ahí» para ayudar y acompañar en la situación a la que se enfrentan la familia y los pequeños.

Representantes de casi todos los partidos políticos con representación municipal se sumaron al dolor de los padres y amigos. La gran afluencia de personas hizo muy difícil guardar las distancias de seguridad pese a la petición del Ayuntamiento en la convocatoria de respetar las medidas, aunque la concentración de disolvió rápidamente.

Un vecino de 28 años con problemas mentales asestó a Camila R. V. tres puñaladas minutos antes de las 7:30 horas del viernes, que le causaron la muerte horas después en el Hospital de Sant Joan d’Alacant, donde fue trasladada por los sanitarios en estado muy crítico, según indicaron fuentes de la investigación.

El suceso se registró en el centro urbano cuando su agresor, con antecedentes, sorprendió por la espalda a Camila y le asestó tres puñaladas. Según fuentes policiales y de la Guardia Civil, no existía ninguna relación entre agresor y víctima, por lo que en un principio se descarta un móvil machista. Está previsto que el detenido pase a disposición judicial entre hoy y mañana.

Los padres de Camila, en el centro, ayer con el alcalde. | INFORMACIÓN

El progenitor del homicida detenido: «¿Qué has hecho?»

Momentos después del suceso, además del traslado a centro hospitalario de la víctima, fue necesario el de otra persona que estaba sufriendo un ataque de ansiedad. Se trataba del padre del agresor, quien, momentos después del trágico suceso, bajó a la calle y se quedó tremendamente sorprendido al ver lo que había hecho su hijo. «¿Qué has hecho?», le preguntó el progenitor al agresor antes de precisar atención médica.

Una campellera más desde hace 20 años

Los padres de Camila, muy afectados por la situación, agradecieron el masivo apoyo de los ciudadanos y las instituciones. De origen colombiano, la familia lleva una veintena de años establecida en El Campello, donde la joven labraba su futuro y el de sus hijos, un niño y una niña a los que sacaba adelante limpiando casas mientras cursaba estudios en el instituto para mejorar su vida y la de los suyos. Era una campellera más. El Ayuntamiento, además de convocar el acto de despedida que tuvo lugar ayer con una afluencia que superó las mil personas, anunció que ya ha activado el protocolo para que los Servicios Sociales actúen de inmediato, incluyendo la necesaria ayuda psicológica que precisan los familiares.

Por otra parte, la concejala de Bienestar Social del municipio, Mercé Pairó, explicó que Camila y su familia recibieron ayuda económica y alimentos durante el primer confinamiento, y que ahora también se les prestará toda la ayuda posible tras la pérdida de la joven.