El exdecano de los Graduados Sociales de Alicante suma más de una decena de juicios suspendidos

Otro proceso a Francisco Méndez vuelve a aplazarse por la renuncia de su letrado en el momento en que iba a comenzar la vista

Méndez sentado en el banquillo frente a su abogado en el estrado.

Méndez sentado en el banquillo frente a su abogado en el estrado. / Jose Navarro

J. A. Martínez

J. A. Martínez

Nueva suspensión de un juicio en la Audiencia Provincial con el exdecano de los Graduados Sociales de Alicante Francisco Javier Méndez en el banquillo. Su abogado presentó la renuncia en el mismo momento en que iba a comenzar la vista en la que Méndez estaba acusado de quedarse con 75.000 euros de indemnizaciones por despido de sus clientes. La renuncia del letrado indignó tanto a las víctimas como al propio tribunal ya que era la quinta vez que este juicio se tenía que suspender. Pero en otras salas de la Audiencia, Méndez acumulaba al menos otras seis suspensiones más por otros dos juicios que al final sí se acabaron celebrando y terminaron en condena. Entre ellos, el del agujero contable de 400.000 euros que dejó en el Colegio de Graduados Sociales y por el que acabó presentando su dimisión en 2016 y por el que se le impusieron once meses de prisión.

En el juicio suspendido este lunes, la Fiscalía pedía cuatro años de cárcel para Méndez por haberse apropiado presuntamente de más de 75.000 euros de los fondos del Fondo de Garantía Social (Fogasa) que debían haber percibido cinco trabajadores de una empresa de mármol a quienes había representado como abogado en procesos por despido entre los años 2015 y 2016. La suspensión del juicio provocó la indignación de los perjudicados, que vieron cómo Méndez se marchaba del edificio escoltado por la Guardia Civil y que la vista ha quedado aplazada hasta el 25 de septiembre. «Seguro que la próxima vez hará lo mismo», aseguraban resignados.

Era la quinta vez que se suspendía el juicio. Parecía que ésta iba a ser la definitiva por lo que había cierta inquietud porque la vista fuera afectada por la huelga de Letrados de la Administración de Justicia que comienza este martes. Sin embargo, la suspensión llegaba por parte de la defensa con una petición que dejó perplejos al resto de las partes.

Renuncia por sorpresa

El letrado Rafael Mira Miralles, que ha venido representando a Méndez en las diferentes causas penales que le han sentado en el banquillo, anunció a la sala al arrancar la vista que presentaba su renuncia debido a un conflicto de intereses. Según explicó, estaba defendiendo como abogado a algunas de las personas que ejercían la acusación particular en otra causa que está pendiente de juicio en el juzgado de lo Penal número tres de Alicante, un hecho que hacía incompatible la defensa en este otro juicio. El magistrado José Antonio Durá expresó su indignación porque le citada causa es del año 2014 «y usted no ha dicho nada hasta ahora, ni trae documentos que acrediten nada, ni explica en qué consiste ese otro juicio. No cabe mayor mala fe procesal». El letrado aseguró que habían confiado en que el otro juicio habría quedado cerrado antes de éste, que su cliente le había pedido expresamente que aguantara y no dijera nada. La documentación que tenía de esa otra causa esgrimida era una notificación en el móvil.

La Fiscalía consideraba que era una maniobra dilatoria perpetrada entre el letrado y su defendido, mientras que las acusaciones particulares optaron por atenerse a lo que resolviera la sala. En un primer momento, el tribunal aseguró que iba a rechazar la petición, pero el letrado advirtió que él ya había renunciado y que, si el juicio se celebraba, sería sin él como abogado. El magistrado advirtió que iban a estudiar si tomaban medidas y planteaban algún tipo de actuación disciplinaria ante el Colegio de la Abogacía (Icali).

En este punto, Méndez intervino para preguntar: «¿yo no puedo decir nada señoría?», a lo que el magistrado le respondió que no, que ya hablaría cuando le correspondiera. El juicio se suspendió y Méndez y su letrado se marcharon de la sala por separado.

«Los perjudicados siempre somos los mismos», se lamentaba una de las afectadas.

Suspensiones de última hora

Cuarentenas por covid, mareos, problemas de muelas y hasta ofertas de acuerdos de última hora que luego no acababan fraguando. Desde el año 2019, el expresidente de los Graduados Sociales ha acabado planteando a última hora incidencias que obligaban a suspender la vista en las tres causas que tenía pendientes en la Audiencia. Dos de ellas, pudieron juzgarse a pesar de acumular seis suspensiones. Queda pendiente esta otra, en la que Méndez tendrá que volver al banquillo con un nuevo abogado.