Entradas para una disco y droga: los regalos que habría recibido el arquitecto municipal detenido en Alicante por ayudar a un supuesto narco

Entradas para una discoteca, droga para consumo y un viaje a Ibiza que no consta si al final se realizó. Estos son, según la investigación, algunos de los «regalos» con los que el presunto cabecilla de una red de narcos detenido el miércoles en su domicilio de Alicante habría «pagado la ayuda» en la concejalía del Urbanismo del Ayuntamiento de la capital al arquitecto municipal también arrestado en el marco de esta operación.

Ambos permanecen desde su detención en los calabozos de la Comisaría provincial donde está previsto que este viernes sean puestos a disposición judicial por los delitos de tráfico de drogas, blanqueo y cohecho.

Junto a ellos han sido detenidas otras diez personas, algunas de las cuales ya están en libertad con cargos y otras también comparecerán este viernes en el juzgado.

Entre los arrestados se encuentra personal que se encargaba del cuidado de dos plantaciones de marihuana, ubicadas en sendas naves en Novelda y La Romana, de donde partió la investigación que ha dirigido el juzgado de Instrucción número cuatro de Novelda. 

Al funcionario municipal, que apenas llevaba un año como fijo y quien tras pasar por el área de Gestión Urbanística ahora estaba destinado en la de Planeamiento, se le imputa hacer «favores» al supuesto cabecilla de la red en Urbanismo para rentabilizar inmuebles comprados o construidos con dinero supuestamente procedente de la droga.

Pinchazos telefónicos

Precisamente unos de esos inmuebles aparece en las conversaciones telefónicas intervenidas en esta investigación. Se trata de un edificio de apartamentos turísticos que el supuesto narco quería levantar en la calle Maldonado de Alicante, en pleno Casco Antiguo, sin dejar el patio de luces que exigía el Ayuntamiento para edificar en ese espacio otras dos viviendas y obtener más rentabilidad, lo que finalmente no habría permitido en Ayuntamiento. 

Aun así, los investigadores tienen constancia de cómo Rafael G.M., con antecedentes por tráfico de drogas, reclamaba al arquitecto Francisco N. T. , que le ayudara con las gestiones en Urbanismo, incluso a tener una reunión con la concejala, lo que el funcionario aseguraba que hacía, aunque no consta que tuviera lugar ese encuentro.

También habría hecho gestiones para un local en la calle Altamira de Alicante de un amigo del presunto narco que estaría abierto sin licencia o con una que se correspondía con la actividad que desarrollaba, para el que también reclamó ayuda al arquitecto. 

Todo ello, supuestamente, a cambio de entradas en una discoteca de la calle San Fernando de la capital a la que el arquitecto solía ir con sus amigos, de droga, y de algún viaje, al parecer a Ibiza, que no consta que al final se realizara.

Los dos principales detenidos son amigos desde la infancia, según la investigación. 

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