«Es necesario ayudar al profesorado para que mejore su formación para poder dar clases en inglés. Para ello necesitamos un buen programa de cursos, una línea de ayudas establecida y una serie de incentivos para impartir docencia en esa lengua. Son medidas que contemplo implantar en los próximos cuatro años». Esta fue una de las respuestas de la candidata a rectora de la Universidad de Alicante (UA) Amparo Navarro a las preguntas que enviaron los lectores al chat de INFORMACIÓN en el que la catedrática participó este lunes y contestó a 46 preguntas por espacio de cerca de dos horas. Las elecciones se celebrarán el próximo jueves día 3, por lo que gran parte de las cuestiones provenían de la propia comunidad universitaria que le planteaba preguntas y mejoras muy concretas para la vida en el campus.

Varias de las cuestiones giraron en torno a los idiomas, pero también se formularon muchas sobre la estabilización del profesorado y, sobre todo del personal de administración y servicios, con un elevado porcentaje de interinidad en la institución académica.

Por lo que respecta a los idiomas, Navarro explicó que su programa incluye el multilingüismo y también la eliminación de la exigencia del nivel B1 de una lengua extranjera en la UA, una de sus propuestas estrella. La candidata asegura que «nos preocupa que ese requisito, que no existe en otras universidades, acabe perjudicando económicamente al alumnado, y que no garantice un verdadero conocimiento del idioma. Por eso abogamos por eliminar esa exigencia y fortalecer las ayudas para adquirir, voluntariamente, niveles superiores». «Nuestra apuesta será siempre ofrecer una enseñanza de calidad en las dos lenguas oficiales e incrementar la docencia en otras lenguas», afirmó Navarro.

La candidata a rectora de la UA posa con su equipo. | ALEX DOMÍNGUEZ

A tenor de las preguntas planteadas preocupa el acceso a la carrera en la UA y su posterior estabilización. A este respecto, la catedrática de Derecho Financiero y Tributario señala que «nos comprometemos a un plan de estabilización del personal interino utilizando todas las herramientas que nos permita la normativa vigente, incluyendo aquellas resoluciones judiciales que se vienen produciendo». «Todo esto debe acometerse a través de las ofertas públicas de empleo previstas y calendarizadas cuando la situación sanitaria nos lo permita y después de haber revisado las convocatorias (baremo del concurso, temario, plazas) que pueden ser mejoradas para facilitar la estabilidad. Todo ello debe ir acompañado de acciones formativas para preparar con garantías las convocatorias», explica. Asimismo, quiere «acabar con la figura de los llamados falsos asociados, dando para estos casos una solución laboral de mayor estabilidad con mejores condiciones de trabajo y medidas para que el profesorado asociado que desee desarrollar una carrera académica pueda hacerlo». Y adaptar la normativa de teletrabajo «generalizándola para todas las escalas».

También le preguntaron a la candidata si pensaba «quitar el deporte de la UA», a lo que respondió que «el deporte es una línea estratégica y prioritaria de mi proyecto». «En el programa de mi candidatura se indica con rotundidad que reforzaremos y optimizaremos el deporte en la UA para toda la comunidad universitaria y el acceso a practicar deporte y ejercicio tanto en las instalaciones, como en competiciones internas, universitarias y de deporte federado», añade. Al mismo tiempo, indica que «la salud es una línea estratégica tanto desde el punto de vista medioambiental, como de la salud integral de todos los colectivos, incluyendo la salud psicosocial, la actividad física y deportiva y la calidad de vida» y para ello pondrá en marcha un nuevo servicio en caso de resultar elegida rectora.

También promete más ayudas para el alumnado, una Casa del Estudiante, más enchufes en las aulas para los portátiles y mejorar las condiciones de la docencia dual que es «una solución temporal». «Somos conscientes de los problemas económicos y sociales que están padeciendo los estudiantes y sus familias. Dedicaremos todo nuestro esfuerzo con ayudas de emergencia y flexibilidad en los estudios», así como fraccionar el pago de la matrícula hasta en ocho plazos.

«Una carrera profesional plena para todos los colectivos, una mejora de la calidad docente y de la excelencia investigadora y una mayor reputación y prestigio de nuestra universidad» son sus tres prioridades, resume Navarro.