El cambio climático contra el plan de ahorro de la Universidad de Alicante

La UA ha tenido que adelantar la puesta en marcha de los equipos de climatización ante las extremas temperaturas de abril

Una estudiante abanicándose en los pasillos de un edificio de la Universidad la semana pasada.

Una estudiante abanicándose en los pasillos de un edificio de la Universidad la semana pasada. / HECTOR FUENTES

J. A. Martínez

J. A. Martínez

Las alteraciones climatológicas de los últimos meses han trastocado una parte de los planes de ahorro energético de la Universidad de Alicante (UA). La Universidad ha tenido que adelantar tres semanas el encendido de los sistemas de aire acondicionado para luego encontrarse con que las temperaturas han vuelto a descender.

El mes de abril ha sido uno de los más secos de la historia y ha hecho que tanto en la provincia de Alicante como en otros puntos de España se registren temperaturas nada habituales para esa época del año. Calor que ha achicharrado a estudiantes de diferentes edificios de la Universidad de Alicante que se encontraron con que el aire acondicionado estaba apagado. Una medida que se adoptó en cumplimiento de las medidas de ahorro energético decretadas por el Gobierno. Pese al plan de ahorro, el disparatado precio de la luz había causado que el año pasado 6,5 millones fueran destinados a hacer frente a estos gastos. Pero el calor había provocado el malestar entre los estudiante, en especial en la zona donde se estudia Magisterio, que habían amenazado hasta con convocar una huelga. Las inusuales temperaturas habían cogido de sorpresa a todo el mundo, ya que el encendido de los equipos no estaba previsto hasta finales del mes de mayo.

Desde la semana pasada se ha ido restableciendo todo el sistema de climatización, que no se ha puesto en marcha en todos los edificios al mismo tiempo. "No consiste en apretar un botón. Es un sistema complejo que requiere su tiempo", señaló a este diario el vicerrector Salvador Ivorra. Sin embargo, cuando el sistema ya está operativo, las temperaturas han vuelto a descender otra vez desde el fin de semana y las previsiones apuntan a que podrían seguir cayendo.