El incremento de gaviotas, especialmente de la especie protegida "Auodin", en el Parque Natural de las Laguna de Torrevieja, está generado problemas higiénicos en algunos puntos del entorno de los humedales. Si en julio la Nueva Compañía Arrendataria de las Salinas de Torrevieja instaló en el punto más alto de su complejo la reproducción artesanal de una águila custodiando su nido, la cual mediante un sistema de megáfonos emite el graznar de esta ave rapaz, con el fin de intentar ahuyentar a las gaviotas, últimamente la EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales) de Torrevieja, se ha visto obligada a tomar una medida similar. En la EDAR las gaviotas se posan sobre los carros de decantado de las aguas residuales originando problemas de limpieza en sus instalaciones, por lo cual, cuando la concentración de estas aves es muy numerosa, un sistema eléctronico difunde por altavoz sonidos similares a los del estruendo de una pequeña explosión, para ahuyentarlas.

En principio estas explosiones, no molestas para los vecinos del entorno de la Depuradora, las relacionaban con las obras del tendido de las tuberías de captación y retorno de la desalinizadora, creyendo que se trataban de cargas de dinamita para volar la piedra con el fin de construir las zanjas.