Las calles del casco urbano, las pedanías y la zona costera de orihuela amanecieron ayer casi sin basura a la vista. Un total de 60 empleados que trabajan en el servicio arrancaron el pasado viernes a las 20.30 horas un dispositivo especial para limpiar los desperdicios acumulados durante las cinco jornadas de huelga y poco antes de las 11 de la mañana del sábado dieron por concluida la tarea.

El representante del comité de empresa de la UTE "Orihuela Capital de la Vega Baja", que hasta ahora venía desarrollando el servicio, explicó que además de la retirada de las basuras en sí, los operarios se han afanado en limpiar y desinfectar las papeleras y contenedores repartidos por la ciudad para eliminar la suciedad acumulada y evitar que continúen desprendiendo malos olores. Almagro indicó que el desarrollo de esa intensa jornada laboral se desarrolló sin ningún incidente reseñable e indicó que el servicio continuará prestándose con normalidad durante los próximos días.

Intervención

El punto y final a esta huelga del servicio lo puso el viernes el Ayuntamiento de Orihuela cuando elevó a definitivo un decreto mediante el que se intervenía el servicio de recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza viaria. El decreto entró en vigor a las 15 horas y tres técnicos designados por el Ayuntamiento y coordinados por la Concejalía de Aseo Urbano tomaron las riendas del servicio.

Si nada cambia, el Ayuntamiento será el encargado de gestionar el servicio durante los próximos tres meses utilizando la maquinaria y las instalaciones de la UTE que hasta ahora ha sido la concesionaria del servicio, quien además está obligada a facilitar la documentación que le requieran los gobernantes para poder desarrollar el servicio con normalidad.

A este respecto, el representante del Comité de Empresa concretó que los trabajadores habían accedido a ponerse a las órdenes de los inspectores municipales porque eso les garantiza cobrar la mensualidad de enero y sobre todo les daba la seguridad de no tener problemas similares al menos en los próximos tres meses.

La UTE que forman Liasur, Gobancast y Valoriza (antes Sufi) pedía para desconvocar la huelga que el Ayuntamiento resolviera el contrato y aceptara indemnizarles con 16 millones de euros, una cifra que el consistorio no aceptó. Cabe recordar que en el Ayuntamiento se encuentra en marcha un expediente de resolución fundamentado en incumplimientos del servicio como el impago de los salarios a los trabajadores dentro del plazo legal.