El acuerdo del pleno de Rojales para introducir una modificación en el Plan General de Ordenación Urbana del municipio con el que incentivar la construcción de establecimientos hoteleros ha sido el primer paso de la corporación para la consecución de un objetivo: presentar la localidad como un lugar de descanso alternativo para los turistas que llegan en busca de sol y playa y desean estar alojados en un entorno más bien tranquilo. Para atraer a inversores, el Ayuntamiento permitirá la máxima edificabilidad en las parcelas destinadas a este uso, y la superficie que el hotel destine a zonas como aparcamiento o piscinas podrá ser recuperada construyendo más alturas.

El acuerdo, que fue aprobado por unanimidad del equipo de gobierno socialista y los dos grupos que componen la oposición (PP y PADER), ha sido sometido ahora a información pública en el Diario Oficial de la Comunidad Valenciana y se podrán presentar alegaciones al respecto hasta el próximo 15 de marzo.

Mayor edificabilidad

El alcalde de la localidad, Antonio Pérez, explicó a este diario que el PGOU de Rojales se caracteriza por su "baja edificabilidad" en espacios destinados a la instalación de negocios, donde hasta ahora los promotores de establecimientos hoteleros tan sólo podían destinar a la construcción del edificio principal el 50% de la superficie de la parcela. Con la nueva modificación, el propietario tendrá derecho a construir un inmueble que tenga el mismo número de metros que tiene su terreno, y los metros que destine por ejemplo a zonas ajardinadas podrá recuperarlos construyendo más alturas en el edificio hasta un máximo de tres. No obstante, el PGOU de Rojales no permite la construcción de estos establecimientos en cualquier ubicación, y sólo se pueden instalar en aquellas zonas delimitadas por el plan como espacios destinados a zonas comerciales.

Se trata de una medida que persigue "aprovechar la cercanía del municipio a localidades costeras como Torrevieja o Guardamar ofreciéndolo como un lugar alternativo donde poder hospedarse a muy pocos kilómetros de la playa y alejados del bullicio de ciudades más grandes", explicó el regidor, quien se mostró confiado en que los hoteles del municipio podrían atraer a un segmento específico del turismo que traería grandes beneficios a la vida económica de Rojales.

El regidor reconoce que quizás la coyuntura económica no es lo suficientemente boyante como para que en este preciso momento haya demasiados constructores interesados en sacar adelante proyectos hoteleros en la localidad, pero tiene la firme convicción de que necesitan estar preparados para "tratar de salir con fuerza de la crisis cuando la situación comience a mejorar".

Reciclaje profesional

Por otra parte, Pérez subrayó la prosperidad que este tipo de negocios traería hasta el municipio dado que, por un lado, ayudaría a rebajar la cifra de peones de la construcción desempleados mientras se levantan los nuevos edificios y, por otro, permitiría que muchos de estos parados se reciclaran y pudieran encontrar acomodo entre las plantillas de trabajadores de estos hoteles desempeñando distintas funciones.

El primer edil concluyó que hasta el momento sólo existe un hotel y un residencial de apartamentos en la localidad , y destacó las innumerables ventajas relacionadas con el turismo que pueden aprovecharse gracias a la situación geográfica del municipio.