Un vecino de Daya Nueva, con gran sangre fría, logró evitar un atraco el pasado domingo, pese a que el ladrón iba armado con una escopeta de aire comprimido, le quitó la media y lo puso en fuga. La Guardia Civil ya lo ha detenido y tiene 39 años. Los hechos ocurrieron de madrugada, cuando la víctima salía de un restaurante situado en el polígono industrial . En ese instante, un hombre en bicicleta y con una bufanda que le tapaba la cara, se le aproximó pidiéndole dinero. Ante la negativa de éste a darle lo que solicitaba, sacó una pistola y amenazó con dispararle.

La víctima, explicó ayer la Comandancia en un comunicado, "se dio cuenta de que el arma no era real e hizo frente al atracador, intentando sin conseguirlo arrebatarle la pistola, pero logrando apartarle la bufanda que le cubría el rostro". Esta fuerte oposición provocó que el ladrón se diera a la fuga, sin poder arrebatar objeto alguno a su víctima que puso una denuncia por estos hechos.