El portavoz de Claro, el partido de Orihuela Costa, Bob Houliston, y el portavoz de Compromís en la Vega Baja, Pablo Perales, instaron ayer a Medio Ambiente a que tome medidas con la mayor celeridad tras el informe remitido por el Seprona y que apunta a la posible emisión de gases tóxicos en un vertedero ilegal clausurado hace 15 años en Campoamor y que actualmente pertenece al término municipal de Pilar de la Horadada, aunque son centenares de vecinos de Orihuela Costa quienes sufren las consecuencias de los olores y gases que emanan de los enterramientos de basura.
Por tanto, piden que la denuncia presentada por un grupo de vecinos en julio, y a la que la formación liderada por Bob Houliston dio su apoyo en representación del litoral oriolano, continúe investigándose en los juzgados y sirva para acabar con una solución que los vecinos llevan años soportando.
Las basuras se encuentran enterradas en una parcela de 150.000 metros cuadrados y en montañas de hasta 20 metros de altura, lo que genera unos «olores insoportables e insalubridad», según los vecinos.
El Seprona insta en su informe a la fiscalía de Medio Ambiente a comprobar con los equipo necesarios el nivel de emisión de estos gases.