Lo que en principio iba a ser un encuentro para escenificar el apoyo de la Generalitat Valenciana a la reivindicación de los regantes de cerrar los pozos de sequía con motivo del travese a agua de la cuenca del Segura a los regantes del Trasvase ante el déficit hídrico de estos últimos, se convirtió en una primera toma de contacto entre el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro, y las 17 comunidades del regadío tradicional, al cerrarse un acuerdo contre los agricultores y el Ministerio el pasado jueves para cerrar los pozos en diciembre.

La reunión mantenida ayer en el Juzgado de Aguas de Orihuela y a la que asistieron Manuel Aldeguer, director general del Agua, representantes de todas las comunidades de regantes y así como representantes municipales de toda la comarca, sirvió para que los agricultores pusieran sobre la mesa sus necesidades y cargaron una vez más contra la Confederación Hidrográfica del Segura, de la que depende la apertura de estos pozos de sequía, no solo por la decisión tomada y que ha afectado a cerca de 30.000 agricultores de la comarca, sino por «las formas que ha utilizado en sus escritos para dirigirse a nosotros, que han sido totalmente discriminatorios», señaló Carlos Valero, de Almoradí.

«Si le dijera que estamos totalmente satisfechos estaría mintiendo», afirmó, dirigiéndose a Álvaro. La actitud de la Confederación «ha dañado nuestra dignidad», a la vez que ha mostrado una dejadez en atender sus reivindicaciones «al asegurarnos que no están obligados a contestar a nuestros escritos y remitiéndonos a su página web» a la hora de buscar respuestas.

Mediar

Álvaro se comprometió a mediar para que «esta situación (la de la apertura de los pozos de sequía) no marque un referente» de cara a próximos decretos de sequía ya que «no es aceptable que se riegue con agua de peor calidad disponiendo la cuenca de agua de mejor calidad». El secretario autonómico se comprometió a mantener el apoyo «gobierne quien gobierne tras el 20-D».

El juez de Aguas de Orihuela, Manuel Larrosa, rehusó ayer hacer declaraciones tras la reunión, aunque en su discurso inicial sí pidió a Álvaro seguir trabajando para modernizar el sistema de riego, lo que traería consigo un ahorro en materia hídrica.

En cuanto a inversiones a este respecto, Álvaro aludió a las «dificultades financieras» a pesar de que «la Conselleria de Medio Ambiente ha aumentado un 5% su presupuesto» de cara a 2016 para «ir a un modelo de agricultura que vaya evolucionando de acorde al cambio climático y la escasez de recursos hídrico».