La delimitación de espacios públicos y usos portuarios del puerto de Torrevieja (DEUP) diseñada por la Generalitat Valenciana prevé reservar el 86% del espacio a la actividad náutica y deportiva, cuando hasta ahora dispone del 50% del total. La nueva superficie se ganará al trasladar la actividad pesquera desde el dique de Levante al de Poniente, liberando así la zona en tierra que actualmente ocupa la lonja y edificios anexos y también la lámina de agua que utilizan los pesqueros a su entrada y salida del muelle. Con la propuesta del Consell, el área destinada a la actividad de la pesca pasará del 12% al 2%, pues se estima que en la actualidad está «sobredimensionada».
El DEUP del puerto de Torrevieja se encuentra en este momento en fase de exposición pública, con periodo de presentación de alegaciones. Viene a ser algo así como el Plan General de un municipio y sirve para sentar las bases para distribuir la ocupación de espacios. Una de las principales novedades que introduce es la propuesta para cambiar la ubicación de la actividad pesquera aunque, según fuentes del equipo de gobierno, esto no quiere decir que se vaya a hacer a corto plazo. No obstante, sí es la hoja de ruta que se marca la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio para ordenar la actividad portuaria. Este diario contactó ayer con la Cofradía de Pescadores de Torrevieja para conocer su opinión al respecto, aunque no obstante declinaron hacer declaraciones. Lo mismo señalaron desde la oposición del PP, que estudiará a fondo el proyecto antes de pronunciarse debido a la importancia del asunto.
Estado deficiente
En el estudio se recoge que el puerto de Torrevieja cuenta con una importante actividad pesquera que hoy se desarrolla en los muelles situados en el extremo norte, junto al dique de Levante. Destaca que en esta zona se dispone de lonja y almacenes en deficiente estado, fábrica de hielo, superficie para tendedero de redes y suministro de agua y carburante.
«Atendiendo a los valores de sus principales magnitudes se puede destacar que el conjunto de sus infraestructuras es superior en proporción al volumen de la actividad, en comparación con los demás puertos de la Generalitat. El volumen de capturas se considera estable y con pocas perspectivas de incremento por las normativas de protección a las especies marinas. A pesar de ello, las capturas totales representan aproximadamente más del 30% de las capturas totales de los tres puertos de la zona sur y el 5% del total de capturas de toda la Comunidad Valenciana», se indica en el proyecto.
Demasiado espacio
Los ingenieros redactores de este estudio consideran que el espacio que se ocupa para desarrollar esa actividad pesquera esta «sobredimensionado» e incorpora «edificios antiguos cuyo aprovechamiento actual no es óptimo y que ocupan una importante zona en la fachada marítima del puerto». Con ellos se refieren tanto a la longitud de muelles pesqueros como a las casetas de pescadores y la zona de tendero de redes.
Para justificar el traslado al dique de Poniente se recuerda que en el año 2008 se construyó una nueva dársena en la zona. El objeto de dichas obras era liberar los espacios actuales de la actividad pesquera, dado que están más próximos al frente urbano y con una comunicación viaria más débil. Y esa es la apuesta que se seguirá ahora.
Con el traslado de la actividad pesquera seguiría creciendo el espacio dedicado a uso náutico y deportivo. Torrevieja cuenta con más de 2.500 amarres para embarcaciones repartidas entre el Real Club Náutico, Marina Internacional y Marina Salinas, lo que le posiciona como el puerto que dispone de más plazas de toda la Comunidad Valenciana, según recoge el DEUP.
