Cambiemos Orihuela volvió ayer a sembrar dudas sobre la viabilidad del proyecto de urbanización en Cala Mosca, que supondría hasta 1,500 nuevas viviendas y que lleva una década paralizado. Según el concejal Javier Gracia su ejecución es «insostenible» porque no existe más capacidad en el litoral para depurar las aguas residuales.

Según explicó ayer, un informe de la EPSAR (Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales) explica que la depuración de agua en Orihuela Costa está preparada para tratar 12.000 metros cúbicos al día como máximo. «El propio informe revelaría que Orihuela Costa, trata, en temporada baja 6.000 metros cúbicos diarios, pero en temporada alta alcanza los 12.400»; es decir, que supera el máximo. Según Javier Gracia «esto revela que nuestro grupo tiene razón al afirmar que el urbanismo de Orihuela Costa es insostenible. Si Orihuela Costa ya es insostenible con las urbanizaciones existentes. ¿Cómo demonios piensa el Gobierno de Orihuela en favorecer 1500 viviendas más?».

Claras

Según el edil de Cambiemos, el informe al que ha accedido su grupo no autoriza ni deniega el proyecto, sólo informa de los requisitos que serían necesarios para poder ejecutarlo desde el punto de vista del saneamiento de aguas. «En todo caso las conclusiones son claras: el necesario ahorro de agua y cuidado del territorio es incompatible con Cala Mosca y el Ayuntamiento de Orihuela y el promotor, lo saben perfectamente».

Según la formación, el proyecto también es inviable desde el punto de vista medioambiental, por la «invasión» sobre flora y fauna protegida. Javier Gracia explicó que de los datos obtenidos desde la Dirección General de Medio Ambiente, en un informe remitido al Ayuntamiento, se observan deficiencias y problemas en el proyecto que conectan con lo que han denunciado diversos grupos, vecinos y asociaciones. Así, en el proyecto se observan «discrepancias entre la cartografía del proyecto y la realidad física».

A juicio del edil de Cambiemos, «dicha discrepancia resulta como poco llamativa, teniendo en cuenta que este proyecto ya es antiguo. No deberían producirse». Además, el informe también revela que el promotor «intenta maximizar el espacio ocupado, incluyendo aparcamientos. Además, vende un falso plan de protección de las especies protegidas que estarían gravemente afectadas» porque « no respeta las zonas de protección de las especies afectadas». El edil de Cambiemos remarcó que «no es sólo nuestra última playa virgen, también es un núcleo donde hay especies protegidas y un delicado ecosistema, el cemento sólo lo destruirá. Es una lástima que el Gobierno de Orihuela se ponga del lado del constructor con su silencio».

Además, Cambiemos asegura que la Dirección General de Carreteras, exigió al promotor en 2014, una serie de informes sobre el impacto de dicha urbanización en la zona y que tres años más tarde no se ha aportado, como un estudio acústico y de impacto de la urbanización en el tráfico de la N-332.