La concejala Carolina Vigara ha solicitado por registro hoy su pase al grupo de no adscritos. Vigara ha estado hasta hoy ejerciendo como portavoz de Vox, y encabezó la lista de la formación de ultraderecha en las elecciones municipales de 2019. El pasado verano de 2020 presentó su dimisión e incluso registró su petición dejar el acta como concejal, pero cuando se iba a celebrar el pleno en el que se formalizaba esta decisión, dio marcha atrás y revocó la petición. Su intención de dejar el cargo se había precipitado por las presiones de Vox de llevar al juzgado supuestas irregularidades en la gestión de los fondos que los ayuntamientos destinan al funcionamiento de los grupos municipales. Incluso estaba prevista su sustitución por Leticia Fernández, tercera en la candidatura y secretaria de grupo. Tras cambiar de opinión mantener el acta Vigara solicitó el cese de la secretaria de grupo, que no ha se ha ejecutado al estar la asesora de baja en ese momento.
El pasado mes de enero la dirección nacional de Vox resolvió «iniciar la expulsión» del partido de su concejala en Torrevieja, Carolina Vigara. Y le pidió que entregara su acta de concejal. El Comité Nacional de Garantías en base «a datos confidenciales que maneja» resolvió iniciar la expulsión de la concejal del partido «y se le solicita el acta porque no es justo que los habitantes de Torrevieja queden sin una representación en el Ayuntamiento acorde a lo que votaron».
Como el acta de Vigara es personal su decisión tras este proceso ha sido mantener el acta y continuar en su labor de gestión en los no adscritos. En esta condición los concejales pueden contar con todos los medios pero no con secretaria de grupo, con lo que Fernández, identificada con la línea oficial de Vox en Torrevieja, deberá dejar esa plaza.
En paralelo a la decisión de Vigara se ha creado en a la ciudad una agrupación de la escisión de Vox a nivel estatal, TúPatria, coordinada con quien fue en segundo lugar en la lista electoral de Vox, Juan Carlos Ramos.
