La guerra entre Orihuela y Rafal no cesa por el barrio de las Casas Baratas, actualmente oriolano pero que el ayuntamiento rafaleño quiere anexionarse. El Consistorio de Rafal seguirá el proceso iniciado por sus servicios jurídicos por vía administrativa para que ese barrio pase a formar parte del término municipal rafaleño. Así lo explicaron este martes el alcalde del municipio, Manuel Pineda, y la concejala de Urbanismo, Noemí Cutillas, tras el anuncio del alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana y de su edil de Urbanismo, José Aix, de que el pleno de este miércoles ratificará la delimitación entre Orihuela y Rafal realizada por el Instituto Cartográfico Valenciano, que da la razón al municipio oriolano a la hora de definir el límite entre ambos términos. Ese informe llegó hace ocho meses pero el consistorio oriolano ha decidido ahora ratificarlo y dar por zanjado su linde con Rafal.
Pineda indicó que, para aprobar definitivamente y ratificar de manera jurídica los límites entre municipios, primero deben presentarse los trabajos realizados por parte del Instituto Cartográfico Valenciano. «Es preciso el acuerdo entre ambos municipios y que este acuerdo esté plasmado en un acta adicional entre los dos municipios que deberá pasar por los plenos municipales», explicó el alcalde de Rafal, quien señaló que esa firma conjunta no se ha llevado a cabo y, por tanto, «lo que pretende Orihuela al llevar el informe del Instituto Cartográfico Valenciano en su próximo pleno es dar cuenta de la opinión de Orihuela de manera unilateral», criticó la responsable de Urbanismo, quien calificó este trámite de «papel mojado». Pineda dijo que, independientemente de lo que el Instituto Cartográfico Valenciano dirima, «tenemos un proceso abierto por la vía administrativa para que las Casas Baratas pasen de Orihuela a Rafal, porque no es de recibo que haya personas que viven allí pero que tienen que estar empadronadas en viviendas de otros familiares para realizar sus trámites administrativos en Rafal, ya que ser atendidos en Orihuela significa desplazamientos mayores que hacerlo en Rafal, donde realmente viven, porque solo nos separa de ellos media calle».
La reclamación de agregación a la Dirección General de Administración Local (DGAL) de la Generalitat sigue adelante y será en última instancia el Consell Jurídic Consultiu quien emita un informe y el Consell quien decida sobre este polémico asunto. «Entendemos que es un tema lógico y normal, ya que es la administración más cercana, en este caso la rafaleña, la que atiende a todos los vecinos de las Casas Baratas, por eso deberían pertenecer de manera plena al municipio», indicó Manuel Pineda. El alcalde rafaleño no dudó en lanzar un dardo a sus compatriotas oriolanos. «Lo único que hace el Ayuntamiento de Orihuela es recaudar impuestos, una manera poco convincente de conseguir las cosas», zanjó.
