El Ayuntamiento de Torrevieja tiene previsto comprar un vehículo valorado en 46.567 euros (IVA incluido) destinado al área de Alcaldía. La partida aparece desglosada en la licitación del contrato que el Ayuntamiento ha impulsado para renovar una parte de su flota de vehículos y a la que va a destinar una generosa partida de 694.000 euros. Además del coche adscrito al área de alcaldía, el contrato contempla la provisión en cinco lotes distintos en un concurso abierto, de otros cuatro turismos, tres SUV todoterreno, ocho furgonetas, seis furgones grandes, dos camiones con caja, un camión con pluma y trece motocicletas. En este caso los técnicos no recurren el alquiler -como hicieron para renovar la mayor parte de la flota de la Policía Local a principios de este mandato-, porque estiman que los vehículos no realizarán más 15.000 kilómetros anuales.
Fuentes del equipo de gobierno del Partido Popular (PP), a preguntas de INFORMACIÓN, precisaron que el turismo adscrito a alcaldía podrá ser empleado por parte de todos los concejales y funcionarios para todo tipo de servicios y no en exclusiva en Alcaldía por el alcalde Eduardo Dolón. «Es un coche adscrito al área de Alcaldía, no es un coche del alcalde», indicaron las mismas fuentes. En la actualidad el primer edil realiza la mayor parte de sus desplazamientos en vehículo propio, en coches de las distintas áreas del Ayuntamiento o, de forma más puntual, en los que se ponen a disposición de los diputados del gobierno provincial ya que Dolón es diputado provincial y su retribución como cargo público corre a cargo del gobierno provincial.
El actual vehículo oficial de Alcaldía, matriculado en 2001, es prácticamente inservible y apenas se utiliza. Aunque el Ayuntamiento dispuso de uno mucho más completo, un Volkswagen Phaenton, entre 2008 y 2013, utilizado durante los últimos mandatos del alcalde Pedro Hernández y el primero de Eduardo Dolón (2011-2015). En este caso era un «renting» que no se renovó porque el vehículo ya había superado su vida útil -aunque sigue figurando en el inventario de bienes municipal, está dado de baja-. Además, la mayor parte del anterior equipo de gobierno de izquierdas renunció al uso de coche oficial -puso en marcha un registro de concejales usuarios- y se desplazaba en vehículos utilitarios del área de Servicios o en coche particular.
El contrato para las nuevas adquisiciones se justifica en la antigüedad y el desgaste de los actuales vehículos municipales, que provoca «gran cantidad de averías, a veces quedando sin reparar debido a su alto coste». Por lo que, para los técnicos, es «indiscutible» que se hace necesaria una renovación total del parque móvil municipal.
Cristales tintados, 235 kilómetros por hora y 190 CV
El PP desvincula la previsión de compra del coche de Alcaldía con la imagen de vehículo oficial. Pero sus características -y su precio-, tienen poco que ver con un turismo convencional. Se desglosan a lo largo de tres folios: 190 CV, con velocidad máxima de 235 kilómetros y cristales tintados entre otros muchos «extras» estándar en vehículos de alta gama. Eso sí, con un motor diesel.
