Una veintena de representantes de los regantes de toda la Vega Baja y de la vecina Región de Murcia se han dado cita en un acto que ha convocado el presidente del PPCV, Carlos Mazón, para "decir alto y claro que vamos a luchar todas y cada una de las batallas por la supervivencia del trasvase Tajo-Segura". En la carretera Hurchillo-Arneva, en Orihuela, junto a lo que ha llamado "los tubos de la solidaridad que aún perviven en España", Mazón ha avanzado que el grupo popular ha presentado en el Congreso de los Diputados una medida para que "el complemento de la desalación no sea gravoso, estableciendo un tope a un precio más que razonable", a través de una proposición no de ley que encabeza el diputado nacional por el PP de Alicante, César Sánchez.
Así, el parlamentario ha detallado que la propuesta tiene el objetivo de que "el Gobierno pueda limitar el precio del agua desalada a 0,30 euros el metro cúbico", con el fin de "ayudar a los regantes que están sufriendo el incremento de los costes energéticos". De esta forma, ha subrayado, desde la Cámara Baja "vamos a defender una política nacional del agua que respete a todos los territorios y que garantice la igualdad de oportunidades para que no haya ciudadanos de primera y de segunda".
En esta línea, Mazón ha insistido en que lo hacen "en nombre de todas las regiones", porque el PP en esta materia tiene "un discurso único en toda España". El partido es pro trasvase, ya que "entiende claramente, sin arrugas y sin matices, que el agua nos pertenece a todos los españoles", ha añadido para luego apostillar que se le va a devolver a "Murcia, Almería y Alicante el protagonismo y el liderazgo en el discurso hídrico nacional". A renglón seguido, ha lamentado que "el partido socialista por desgracia ha desenterrado esta gran guerra sin ninguna razón medioambiental, hídrica, económica, social ni de vertebración".
El presidente del PPCV también ha lanzado un ultimátum al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que "no está consiguiendo absolutamente nada más que hablar con la boca pequeña ante el arrollador mensaje contra el trasvase de sus jefes en Madrid": "Ya no hay medias tintas ni matices ni una posible vía intermedia". A su juicio, "hay que elegir entre el PSOE o el agua que merece nuestra tierra", ha afirmado.
Y solo queda una oportunidad, ha insistido Mazón, "unas semanas antes de la aprobación definitiva de esta cuchillada en el Consejo de Ministros". Es "el tiempo que tienen Pedro Sánchez y Ximo Puig para revertir una de las mayores afrentas a nuestra tierra", exigiendo al PSOE que "diga sí o no al trasvase".
Por ello, ha animado además a toda la ciudadanía a asistir a la manifestación que han convocado los regantes el próximo día 17 a las 11.00 horas en la Plaza de la Montañeta de Alicante.
Por su parte, el secretario general del PP de la Región de Murcia, José Miguel Luengo, que también ha acudido a Orihuela a la llamada de Mazón, también ha pedido a la sociedad que salga a la calle para "poner cordura y el interés general por encima de las ideologías" ante un plan hidrológico que ha calificado de "ideológico". Al mismo tiempo, ha reivindicado "la necesidad de que las alegaciones sean calificadas por técnicos independientes y por científicos", coincidiendo con Mazón, que ha recalcado que "hemos hecho alegaciones que demuestran que nuestra apuesta no es caprichosa, sino que se basa en el rigor medioambiental, científico, académico, social y económico".
"No podemos consentir que nos humillen", ha incidido Luengo, en referencia a "la provocación de la alcaldesa de Toledo, que en el mismo Ayuntamiento de Murcia, causando indignación y asombro, insistió hasta en cuatro ocasiones en que el trasvase debía desaparecer".
La secretaria general del Partido Popular de la provincia, Ana Serna, ha reiterado que el acto pretende que "desde el Gobierno vean esta imagen para que sepan que no vamos a cesar en la defensa de los intereses de nuestro territorio".
Han acudido también varios concejales del grupo popular de Orihuela, incluido el exalcalde Emilio Bascuñana, así como la alcaldesa y coordinadora del PP en la comarca, María Gómez, la diputada Macarena Montesinos y el senador Pablo Ruz. Entre los regantes, Lucas Jiménez, presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), ha lamentado las declaraciones de la portavoz del Gobierno, que ha tachado el trasvase de "antinatura". "Antinatura es la escasa labor en materia de depuración que durante tantos años ha llevado a cabo la Administración de Castilla-La Mancha", ha determinado, al mismo tiempo que ha hecho hincapié en que "el progreso pasa por hacer agricultura como se hace en el Levante, la más sostenible de Europa, usando el menor recurso posible de agua para alimentar al mayor número de personas".
Pedro Mompeán, juez Privativo de Aguas de Orihuela, ha concluido que "han pasado casi tres meses tirando entre 10 y 11 metros cúbicos al mar cuando el pantano de La Pedrera debiera estar lleno". Por último, ha enfatizado que "el agua es de todos los regantes" pero "hace falta administración", y ha hecho un llamamiento a la unidad: "Si los agricultores no nos unimos nunca tendremos nada porque los cargos políticos para defender nuestros intereses antes de mandar deben saber trabajar".
El Gobierno central favorece "un desarrollo más sostenible"
La portavoz del Gobierno central, Isabel Rodríguez, ha defendido el nuevo plan del Tajo, que incrementa los caudales ecológicos en el tramo medio del río, lo que conlleva una reducción de los aportes al trasvase, y ha asegurado que "la única guía" con la que se adoptan estas decisiones es para favorecer "un desarrollo más sostenible".
También ha afirmado que el Ejecutivo tiene una "sensibilidad especial" con el cambio climático, algo que es "una evidencia", tal y como lo demuestran los fenómenos meteorológicos y catástrofes naturales de los últimos meses, como la sequía, la borrasca Filomena o la situación del Mar Menor.
"El Gobierno es sensible a esa realidad", ha incidido la portavoz, que ha subrayado que el Gobierno trabaja para que el país cuente con infraestructuras necesarias para que todo el territorio pueda disponer de agua. Prueba de ello, ha dicho, son las inversiones en desaladoras o en depuración, para "atender a un sector importante" de la Región de Murcia -en alusión al agroalimentario- sin "poner en riesgo el Tajo".
