Torrevieja impulsa una modificación del PGOU para proteger «El Tintero»

El Ayuntamiento de Torrevieja ha aprobado el primer trámite para lograr la protección del tradicional Kiosco El Tintero de la playa del Cura como Bien de Relevancia Local. El local funciona bajo la amenaza de una orden de demolición del servicio de Costas del Ministerio para la Transición Ecológica desde hace más de ocho años.

El gobierno local ha aprobado el inicio del expediente para la elaboración de la memoria de la modificación del Plan General para la catalogación (protección) del singular edificio, que caracteriza el paisaje urbano del litoral de la ciudad desde hace más de ocho décadas. El objetivo es conseguir la protección de una estructura junto al mar que está ligada a la historia de Torrevieja desde hace ochenta años.

Aval universitario

El alcalde Eduardo Dolón (PP) indicó confirmó ayer la intención del gobierno local de proteger la edificación como bien de relevancia local. «Es algo que defendí cuando estaba en la oposición y que defiendo ahora para que no desaparezca», señaló a INFORMACIÓN.

Una opinión que comparten, aunque con matices, todos los grupos políticos con representación municipal. En 2016 fue Ángel García Chazarra, que explota el restaurante del kiosco El Tintero registró en primer lugar una petición para la declaración de este inmueble como Bien de Relevancia Local (BRL). La acompañó de un estudio-informe realizado por expertos del Instituto Universitario de Estudios Turísticos Universidad de Alicante para avalar el valor patrimonial e histórico del enclave.

Plan General

Desde el punto de vista administrativo la modificación puntual del PGOU no garantiza al cien por cien que el edificio se salve, pero es un paso importante -si sale adelante-. El problema que amenaza la continuidad del edificio, más allá de su falta de protección es que está enclavado en dominio público marítimo-terrestre y la concesión expiró sin ser renovada en 2011. La propiedad inició un largo camino judicial, que sigue vivo pese a varios reveses, para reclamar que se le permitiera mantener la explotación con el canon correspondiente y después contra la orden de demolición.

Concesión

Pero el servicio de Costas del Ministerio para la Transición Ecológica insiste en que se demuela por ocupar dominio público sin concesión en vigor, incluso sosteniendo que la lengua de tierra que se adentra en el mar y es artificial pese a ser una plataforma histórica en ese tramo del litoral. Aprovechando una zona del acantilado bajo utilizada tradicionalmente por los pescadores para el tintado de sus artes de pesca, el kiosco «El Tintero» se construyó en los años 30.

Suponían los primeros arranques de urbanización litoral en consonancia con las demandas que generaba cada verano una actividad en auge, el turismo de baños de mar. También los populares bancos de Las Rocas son de esta época, y también, como «El Tintero», permanecen como antaño.

Urbanismo

Durante el anterior mandato el área de Urbanismo respaldó la protección patrimonial del Tintero. Sin embargo, consideró que debía protegerse junto a otros elementos patrimoniales que están sin catalogar en el marco de la nueva redacción del Plan General, que sustituya al actual de 1986, sin adjudicar tres años después de que la baremación de los técnicos esté sobre la mesa.