Entrevista | José Sáez Sironi Presidente de la Junta Mayor de la Semana Santa de Orihuela

"La Semana Santa de Orihuela afronta una situación difícil. Tenemos que hacer malabares"

José Sáez Sironi en el Museo de Semana Santa de Orihuela

José Sáez Sironi en el Museo de Semana Santa de Orihuela / TONY SEVILLA

Loreto Mármol

Loreto Mármol

Sus palabras en el pregón de la Semana Santa sonaron con fuerza, casi como un grito de auxilio ante una ayuda insuficiente por parte del Ayuntamiento. José Sáez Sironi, presidente de la Junta Mayor de Cofradías de la Semana Santa de Orihuela, analiza la salud de la Pasión oriolana en este Domingo de Ramos.  

PREGUNTA: ¿Está en peligro la Semana Santa? 

R: No está en peligro, porque muchas personas estamos trabajando por la Semana Santa.

P: ¿Pasa por una situación de asfixia económica?

R: Más que de asfixia, porque después de la asfixia viene la muerte, diría que afrontamos una situación difícil.

P: ¿Qué ayuda recibe por parte del Ayuntamiento?

R: La ayuda es prácticamente igual en diez años, con el inconveniente de que este año además ha bajado en un 30%. Esto se traduce en que las contrataciones de bandas musicales por parte de las cofradías, de las que se subvencionaba una parte, ahora corren a cargo de su presupuesto, por lo que tienen que recurrir a pólizas y hacer malabares porque cuestan un disparate. Para hacerse una idea, detrás de cada trono va una banda. Solo en la procesión de Viernes Santo hay 27 tronos y unas 25 bandas.

P: ¿Reciben un trato injusto? 

R: La repercusión económica de la Semana Santa para el municipio es de 10 millones de euros, según un informe del Instituto de Estudios Económicos de la Provincia de Alicante. No recibimos ni el 1%. Además, es de Interés Turístico Internacional, como la de Lorca, cuyo Ayuntamiento destina doce veces más de ayuda. Tenemos un trato injusto, máxime cuando tenemos un museo que pagamos íntegramente nosotros.

P: En cuanto al interés de la gente por participar en la Semana Santa, ¿goza de buena salud? 

R: En esto estamos de enhorabuena. Hay una subida significativa de personas que se están apuntando a cofradías y hermandades. Arrastrábamos una tendencia ascendente que se ha confirmado este año. En el Silencio hacía años que no teníamos 30 altas. Sin duda, estamos creciendo.

P: ¿Están tomando el relevo las nuevas generaciones?

R: Estamos dando mucha cancha a los niños y a la juventud. Estos días estamos realizando una actividad en el museo, un recorrido por la Pasión a través de la música, en la que acabarán participando más de mil escolares. Además, estamos trabajando con jóvenes desde 18 a 28 años, dándole cabida por primera vez en la Junta, donde los jóvenes representados tienen voz aunque no voto. Con todo ello, intentamos fomentar y dar más peso a quienes van a coger el testigo. 

P: En el pregón dijo que ponía su cargo a disposición de la Junta si no cumplía en este mandato.

R: Mi objetivo es defender a mis cofradías y a la Semana Santa. Fui reelegido presidente en octubre, y me eligen los presidentes de la Junta Mayor, por lo que si por cualquier causa esa confianza se trunca no tengo problema en dejarlo mañana mismo. No me supone un trauma. Doy paso a otro. El cargo que ocupo es de forma altruista y desinteresada, por amor a la Semana Santa y a Orihuela.

P: ¿Cómo le nace ese amor por la Semana Santa?

R: Como dijo la glosadora del pregón, Mónica Lorente, los niños en Orihuela nacemos con una vesta bajo el brazo. Estoy ligado a la Semana Santa desde pequeño, con recuerdos en una casa familiar de tres pisos en la que todos la vivíamos. Además, soy aficionado a la fotografía, y he retratado las procesiones. Tengo unos siete carteles oficiales. Desde 2004 soy el encargado de editar el libro de la Semana Santa. He sido abanderado y nazareno, presidente desde 2017, pasando una pandemia y el incendio del museo. Lo he vivido prácticamente casi todo.

P: Tendrá un archivo fotográfico abultado. 

R: Unas 10.000 fotografías en dispositiva. Antes celebrábamos una reunión de amigos donde las exponíamos, luego dejó de hacerse con la llegada de las cámaras digitales.

P: Fue fundador de los Pilares de la Soledad, cuya refundación cumple 25 años. También pertenece a los Azotes, al Silencio y al Perdón. Si tuviera que destacar alguna procesión, ¿cuál sería? 

R: Destaco el respeto de Orihuela por la procesión del Silencio, en la que participo desde los 18 años. Intervienen los Cantores de la Pasión, cantando en cuatro sitios estratégicos, y hay una gran cantidad de gente que participa alumbrando. No ha cambiado nada desde los años 40. Se ha mantenido fiel a la tradición. Es una procesión totalmente diferente. La ciudad completamente a oscuras. Algo curioso es que desde que sale jamás se ha suspendido por lluvia, aunque en alguna ocasión ha sido entrar el Cristo en Santiago y empezar a diluviar.