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Colectivos antimilitaristas vuelven a celebrar una marcha para exigir el cierre de la base de Aitana

Varias decenas de personas se suman a la movilización a pesar de la lluvia tras un año de ausencia por el coronavirus

Lectura del manifiesto de la Marcha por la Desmilitarización de Aitana celebrada el domingo. INFORMACIÓN

Colectivos antimilitaristas volvieron a celebrar este domingo la Marcha por la Desmilitarización de la Sierra de Aitana para exigir el desmantelamiento de la base, después de que el año pasado la movilización no pudiera llevarse a cabo a causa del coronavirus. La cita, que ha alcanzado su edición número 17, reunió a varias decenas de personas a pesar de la lluvia, convocadas por el Grupo Antimilitarista Tortuga de Elche, el Ateneu Cultural El Panical de Alcoy y la Colla Ecologista La Carrasca-Ecologistes en Acció d'Alcoi, según han informado fuentes de esta última entidad.

La marcha discurrió, como había venido siendo habitual hasta 2019, desde el Safari Aitana hasta el inicio de la carretera de acceso a la base, donde militares y efectivos de la Guardia Civil impedían el paso. Allí, según las mismas fuentes, se leyó un manifiesto en el que se criticó que la pandemia ha sido "utilizada de manera propagandística para promover el militarismo" en actos como la presencia de autoridades militares en las ruedas de prensa diarias, la utilización de la Unidad Militar de Emergencias para "tareas y funciones propias de los cuerpos especializados de la sociedad civil" o lo que consideran un "abuso de la represión", entre otras.

 

El manifiesto recordó también cómo, a pesar de la crisis sanitaria mundial, han continuado guerras cruentas como las que tienen lugar en el Yemen, Palestina, países del Sahel, Ucrania, Afganistán, Siria "y un largo etcétera", así como otros conflictos "eufemísticamente denominados de baja intensidad, pero no por eso con menos víctimas ni menos desplazamientos de la población", como los del Kurdistán, México, Colombia, Venezuela y Birmania. Todos ellos, añadieron los convocantes, "enmarcados en una dinámica global de un sistema injusto que expolia riqueza en unos lugares del planeta para acumularla en otros, y dentro de estos, en pocas manos".

 

Asimismo, se denunció el "obsceno" gasto militar del Estado español y la fabricación de armamento, "que incluso se exporta a países pobres, dictaduras y zonas en conflicto", a la vez que se aseguró que España permite el uso de las bases militares "para las políticas belicistas e intervencionistas" de Estados Unidos. En ese contexto, las entidades organizadoras reclamaron "el desmantelamiento de la base de radares que el Ejército español tiene en la cumbre de la sierra de Aitana" y reivindicaron "una sierra de Aitana desmilitarizada, protegida medioambientalmente y al servicio de la paz."

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