La consellera de Transportes, María José Salvador, anunció ayer que Ferrocarriles de la Generalitat va a contratar a 25 maquinistas y siete oficiales de taller, con un coste de 1,4 millones de euros, para mantener el servicio, que se encuentra en una situación de personal «crítica». De esta manera, la consellera trata de dar un paso adelante en el intento del Consell para acabar con la huelga del TRAM de Alicante, que dura ya dos meses y que afecta a los 850.000 pasajeros que utilizan todos los meses el tranvía y el tren Benidorm-Dénia, que durante los paros ven afectadas las frecuencias de paso. Ayer hubo nuevos paros que están convocados hasta enero.

Las contrataciones se harán a costa de la futura apertura de la tasa de reposición, con la autorización de la Conselleria de Hacienda y tras una negociación con el Ministerio, al que se ha trasladado de forma continua la necesidad de flexibilizar esa tasa debido a la falta de personal de la empresa.