En España hay casi un millón de personas que tienen muy limitada su capacidad para ver, que tienen baja visión, y dentro de ellos unos sesenta mil son ciegos totales. Destinado a ellos, la empresa israelí Orcam ha diseñado una última versión de su dispositivo MyEye, el MyEye 2.0.

Este nuevo dispositivo incorpora numerosos avances tecnológicos basados en la inteligencia artificial: desde el reconocimiento de caras y colores, hasta programar el idioma o la velocidad de lectura de textos. Es discreto, ligero y de muy fácil manejo, acoplándose lateralmente a unas gafas y sin necesidad de llevar cables o de estar conectado a un ordenador.

Gracias a una cámara integrada y un parlante, MyEye 2.0 convierte en voz las imágenes y permite así leer cualquier texto hasta una determinada distancia, como periódicos, libros, menús de restaurante, señales, etiquetas de productos y pantallas.

Además reconoce caras de personas (actualmente hasta cien caras), y puede identificar productos, colores y billetes de dinero. Las funciones se actualizan también a través de una página web.

Vissum, único en la Comunidad Valenciana que dispone del dispositivo MyEye 2.0

Es preciso puntualizar qué es la ceguera legal y baja visión: desde el punto de vista legal, un ciego es una persona con una agudeza visual menor o igual a 0.1 (10% ) y/o un campo visual menor o igual al 10º. Y alguien con baja visión tiene una agudeza visual entre 0.125 y 0.3 y un campo visual menor o igual a 30º.

Las ayudas para baja visión mejoran significativamente la calidad de vida de afectados por una pérdida irrecuperable de visión, intentando que sean autosuficientes a través de ayudas ópticas, como las lentes especiales, los filtros y los dispositivos electrónicos.

VISSUM es pionero en ofrecer ayudas a personas con baja visión o incluso totalmente ciegas basadas en la inteligencia artificial, que les facilitan enormemente tareas cotidianas, como leer, reconocer caras o colores de una forma sencilla.

Las enfermedades de la retina -como la degeneración macular- junto al glaucoma, son las principales causas de ceguera y de baja visión en España. Pero también hay personas jóvenes con enfermedades congénitas de la vista que pueden beneficiarse de este tipo de ayudas.

La nueva versión del MyEye 2.0, sólo disponible en la Comunidad Valenciana en este prestigioso centro oftalmológico, es un ejemplo de cómo la tecnología está ayudando a personas ciegas. La unidad de baja visión de VISSUM busca potenciar al máximo las capacidades visuales de cada paciente, ofreciendo las ayudas más avanzadas que existen.

Su equipo de optometría analiza cada paciente y prescribe en aquellos casos adecuados el nuevo dispositivo MyEye 2.0, que permite una importante mejora en la autonomía y calidad de vida de personas con una visión limitada debido a enfermedades tan frecuentes como la degeneración macular asociada a la edad o el glaucoma.

Las personas que ya lo están usando cuentan como este pequeño dispositivo ha cambiado su vida, procurando una mayor autonomía en tareas y gestos cotidianos: a la hora de hacer la compra reconociendo etiquetas y precios, y reconociendo caras de personas cercanas, dos gestos muy sencillos pero fundamentales en la vida diaria. También les ayuda a reconocer objetos del día a día, como diferenciar entre tarjetas o entre los colores de la ropa que quieren llevar.