Es una realidad: en verano, los problemas oculares se manifiestan con más intensidad que en otras estaciones del año. Esto se debe a que durante la época estival estamos expuestos a una mayor cantidad de factores que pueden perjudicar la salud ocular, y además, el ambiente cálido de esta temporada es propicio para la transmisión de enfermedades oculares bacterianas o víricas.

Las principales afecciones de los ojos durante el verano son la sequedad, la conjuntivitis y la irritación de ojos. Pero, ¿qué factores desencadenan estos problemas?

Causas del ojo rojo y factores que afectan a la salud visual estos meses

Causas del ojo rojo y factores que afectan a la salud visual estos mesesTener los ojos rojos puede ser, entre otras cosas, causa de sequedad ocular, una exposición excesiva al sol, presencia de polvo u otras partículas, irritación? pero también es uno de los síntomas de la conjuntivitis alérgica o de una conjuntivitis bacteriana.

El cloro de las piscinas uno de los enemigos veraniegos de la vista. De hecho, es un desinfectante muy irritante, ya que está compuesto de cloraminas, unas sustancias altamente tóxicas. El contacto continuado y directo con este líquido suele derivar en conjuntivitis.

Según explica el doctor Enrique Chipont, director médico y especialista en Oftalmología de Oftálica, "las piscinas deberían tener agua con sales minerales, ya que los ojos la toleran mucho mejor al ser parecida a nuestros líquidos, como podemos comprobar al llorar". En cualquier caso, siempre es recomendable el uso de gafas de buceo, sobre todo en niños, ya que son los que más tiempo pasan bañándose y bajo el agua.

Conjuntivitis: información, síntomas y tratamientos

Conjuntivitis: información, síntomas y tratamientosLa conjuntivitis es la inflamación de la conjuntiva, la capa que reviste el interior del párpado y cubre la parte blanca del ojo.

Se distinguen tres tipos en función de su origen: viral (causada por diferentes virus, muchos de las vías respiratorias), bacteriana (por la infección de ciertas bacterias en el ojo, muy frecuente en niños y de fácil contagio); y alérgica (además de por el polen, también puede estar causada por los ácaros del polvo, los pelos de los animales, las lentes de contacto y el líquido para limpiarlas, o los cosméticos).

Los síntomas de la conjuntivitis se reconocen de inmediato y los más frecuentes incluyen enrojecimiento o inflamación de la parte blanca del ojo o detrás del párpado, aumento de la cantidad de lágrimas o mayor sensibilidad a la luz, secreción blanca, amarillenta o verdosa, picazón y ardor en los ojos, sensación de cuerpo extraño o arena, o aparición de legañas y costras en ojos o pestañas.

Extremar las medidas de higiene como lavar las manos varias veces al día, no tocar los ojos con las manos sucias, no compartir toallas o pañuelos y cambiar constantemente las fundas de las almohadas, son algunas de las acciones que ayudan al cuidado de los ojos.

El tratamiento de la conjuntivitis alérgica empieza con medidas locales tales como lavados con suero fisiológico frío y lágrimas artificiales sin conservantes, si no mejora, acudir de nuevo al oftalmólogo.

También es importante evitar la automedicación para no tener complicaciones cuando se sigue un tratamiento de conjuntivitis.

Recomendaciones para el cuidado de los ojos en verano

Recomendaciones para el cuidado de los ojos en verano

  • La exposición prolongada al sol puede provocar afecciones como conjuntivitis, queratitis, problemas de cataratas o afecciones directas en la retina. Los ojos son 20 veces más sensibles a los rayos ultravioletas A y B que la piel, y es por ello que se de debes evitar la exposición prolongada al sol y proteger tu vista con unas gafas con protección UV.
  • Los lugares que más frecuentamos durante la época estival son la playa y las piscinas. En este caso, la concentración de sal o cloro es capaz de ocasionar molestias oculares que pueden convertirse en una conjuntivitis irritativa. Para prevenir esto, lava tus ojos con agua dulce después de cada baño en el mar y en la piscina, y utiliza lágrimas artificiales siempre que sientas un leve picor o molestia.
  • En verano solemos dedicar más tiempo a practicar deportes y actividades al aire libre. La entrada de cuerpos extraños en los ojos (partículas, polvo, tierra) debido al sol o el viento, pueden provocar graves irritaciones e incluso dañar la superficie ocular. Por ello, es recomendable proteger los ojos con gafas envolventes durante estas actividades.
  • El aire acondicionado es uno de los principales culpables del síndrome del ojo seco. Para evitar el ojo seco se deben utilizar lágrimas artificiales y evitar el contacto directo o muy cercano de los ojos con aires acondicionados y ventiladores de alta potencia.