El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado que en las próximas horas se decretará en la Comunidad Valenciana el toque de queda entre las 00 horas y las 6 de la mañana para tratar de frenar el avance de la pandemia. En las próximas 48 horas la Abogacía de la Generalitat y la Conselleria de Sanidad elaborarán una resolución que posteriormente será remitida al TSJ para que dé su visto bueno. Se espera que a comienzos de la semana pueda entrar en vigor la medida.

El presidente confía en que el alto tribunal no ponga objeciones a decretar el toque de queda en la Comunidad Valenciana. Si así fuera se recurrirá al estado de alarma, ha precisado Puig, quien ha comparecido esta tarde en el Palau de la Generalitat acompañado de la consellera de Sanidad, Ana Barceló.

A primera hora de la tarde Barceló ha intervenido en el Consejo Interterritorial de Sanidad para solicitar al Gobierno que el toque de queda se decretara a nivel nacional. Sin embargo, según ha precisado Puig, ha habido comunidades que se han negado por lo que no ha habido un acuerdo. "La Comunidad va a tomar sus propias decisiones, no vamos a dilatar una decisión necesaria para frenar al virus", ha remarcado Puig.

El toque de queda irá además acompañado de otras medidas restrictivas que se anunciarán en los próximos días. El objetivo es impedir que la gente celebre botellones y reuniones multitudinarias, que es lo que está disparando los contagios.