Vecinos de la partida rural alicantina de El Moralet denuncian el estado de abandono del centro sociocultural municipal y exigen al Ayuntamiento que lo acondicione de manera oportuna. La Asociación de Vecinos Nuevo Moralet señala que no pueden realizar actividades en esta instalación, el único espacio de carácter público de la partida, por la falta de mantenimiento y de agua potable, y por la suciedad tanto dentro como fuera del edificio.
En esta cuestión ha incidido un informe elaborado por el grupo municipal de Unidas Podemos-EUPV, que destaca que los vecinos de El Moralet «llevan años denunciando las carencias del espacio, que no cuenta con mobiliario adecuado, ni siquiera sillas, mesas o estanterías». La instalación no aparece en la del Ayuntamiento como centro sociocultural, y la Asociación de Vecinos Nuevo Moralet «no obtiene respuesta» por parte del Consistorio a las instancias realizadas para denunciar las múltiples carencias que presenta el espacio.
Según el informe de Unidas Podemos, los vecinos «no disponen de un lugar mínimamente digno para realizar sus actividades de reunión, talleres y otros encuentros». Unos 2.000 residentes se ven afectados por las carencias del centro, que no cuenta con servicios de limpieza o mantenimiento municipales ni tiene «condiciones mínimas de habitabilidad», según esta formación política. Esa falta de higiene, añaden, ha provocado que la instalación tenga visibles telarañas en las paredes e incluso excrementos de ratas en algunas salas.
El exterior del edificio tiene «basura acumulada» y «una cantidad de maleza y vegetación que dejan inservible este espacio». El portavoz municipal de Unidas Podemos, Xavier López, apunta que «el abandono de las partidas rurales y los barrios» por parte del equipo de gobierno que encabeza el alcalde, Luis Barcala, «es una constante». «Su modelo de ciudad es el de parque temático para el turismo, y no le interesa dignificar los equipamientos y las condiciones de vida de la gente que reside fuera del centro». López señala que Unidas Podemos ya presentó el año pasado una enmienda presupuestaria «para dignificar el espacio», que fue rechazada por el equipo de gobierno.
El vecindario exige un plan de actuación para reactivar el centro, que solo se utiliza para votar en las elecciones, pese a su estado de abandono, y por la Asociación de Pensionistas de El Moralet. Esta entidad costea con sus propias cuotas el mobiliario de una de las salas y la calefacción portátil para poder realizar actividades.
