La Asociación de la Empresa Familiar de Alicante (AEFA) tiene una destacada posición a nivel nacional ya que fue la primera del Instituto de la Empresa Familiar. Fundada el 7 de julio de 1995, defiende los intereses de un tejido muy representativo en la provincia pues supone el 92% de las actividades económicas del territorio, mantienen un 85% del empleo privado y el 75% del valor añadido bruto, indicador para el PIB. «Estamos muy ilusionados y orgullosos porque sabemos la importancia y relevancia social extraordinaria que ha adquirido este premio a lo largo de estas 37 ediciones», señala sobre el «Importante» la presidenta de AEFA, Maite Antón, a quien le entregó el galardón Aitor Moll, consejero delegado de Prensa Ibérica.

«Se nos reconoce como Asociación de la Empresa Familiar de Alicante por su trayectoria, que ponemos mucho en valor porque el paso del tiempo lo que ha hecho es reforzarla, aumentarla en solidez y en dinamismo, crecimiento y adaptación. Pero también creemos que se está premiando a todas las empresas familiares de nuestra provincia».

La presidenta de AEFA, entidad multisectorial y presente en todas las comarcas, destaca el arraigo al territorio en que están implantadas las empresas familiares, que «colaboran con su entorno de una manera u otra, a nivel social, cultural o deportivo. Cada vez que hay una necesidad, cuando llega una DANA o ahora con la pandemia, la empresa familiar se vuelca en la ayuda a su entorno; y mantienen esa fuerza económica y el empleo necesario para todo un territorio. Se premia a AEFA pero también la labor de las empresas familiares de la provincia, lo que es un orgullo doble». A la hora de hablar de las raíces, «parece increíble y hay que poner en valor -señala Maite Antón- cómo hace más de 26 años un grupo de empresarios familiares decidió crear la asociación. Siempre recordamos a Manuel Peláez Castillo como precursor, porque fomentó el desarrollo de nuestra provincia y de la empresa familiar especialmente. Él creía firmemente en ella y así lo demostró. Fueron tan audaces de crear la primera asociación territorial en España del Instituto de la Empresa Familiar, constituido tres años antes. Ese mismo espíritu innovador, pionero, precursor es el que define a nuestra provincia. Nos gusta mostrarnos valedores de ese carácter de anticipación».

En estos 26 años, AEFA ha ido tomando un papel cada vez más relevante en la sociedad alicantina. Entre sus fines está mostrar a las propias empresas familiares la importancia de su continuidad, «ayudarles en esa visión que tienen del largo plazo y en el momento más delicado que es la sucesión a la siguiente generación, formándoles e informándoles para que se produzca con éxito y poder mantener así el empleo, que es su principal función social, haciendo que las empresas crezcan en tamaño con la continuidad en el tiempo». La asociación cuenta con la representación de todo el tejido de la empresa familiar de la provincia, asociada o no, ante las administraciones públicas para la defensa de sus intereses y continuidad, «que tiene un punto fundamental en la protección de las bonificaciones en el momento de la sucesión y la donación, para mantener la riqueza que generan». Dentro de esas funciones, cuentan con dos cátedras, una en la Universidad de Alicante y otra en la Miguel Hernández dado que «el 85% de los alumnos acabarán trabajando en una empresa familiar. Es muy importante que se conozcan, y se sepan sus características e idiosincrasia para poder fomentar las vocaciones empresariales porque el día de mañana pueden iniciar su empresa familiar».

En la provincia las hay hasta de undécima generación, como Turrones 1880 y El Lobo, lo que «significa que hubo un antepasado que fue pionero, y ellos pueden ser ese primero». Como muestra del dinamismo de la asociación, su presidenta enumera iniciativas como el fórum que representa a nuevas generaciones con otras inquietudes «para que el día de mañana sean accionistas responsables estén o no en la dirección de la empresa, y que tenemos el honor de que es el más numeroso de España»; o el senior AEFA, creado este año, capitaneado por Francisco Gómez, quien presidió la entidad durante 8 años. «Aporta ese cariz familiar en donde todas las generaciones aportan una visión diferente. De la conjunción de todas ellas sale la fortaleza de la empresa familiar». Así como una iniciativa con la Cámara de Comercio para que el máximo de empresas lleguen a centenarias.