El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Alicante ha admitido a trámite la demanda vecinal presentada contra el Ayuntamiento de Alicante por los supuestos vertidos de aguas residuales urbanas e industriales sin tratamiento en zonas urbanas consolidadas como las calles Panamá y Perú, calle El Verger, el parque Joan Fuster, el entorno del colegio público CEIP El Palmeral, el parque de la Avenida de Elche y la calle Nadadora Carmen Soto, entre otras zonas.
En el procedimiento judicial abierto, las asociaciones vecinales Gran Vía Sur-Puerto y San Gabriel aseguran que aportan documentación supuestamente probatoria del propio Ayuntamiento, del Seprona de la Guardia Civil y también un acta notarial que "certifica la contaminación en zona urbana y en el Barranco de las Ovejas ocasionada por estos vertidos no autorizados, y que se vienen produciendo desde hace 25 años".
La administración responsable y competente sobre esta autorización, según subrayan, es la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, "que por inacción y/o omisión está siendo cómplice del Ayuntamiento de Alicante, al no inspeccionar las instalaciones ni sancionarlo como titular de las instalaciones contaminantes".
La situación denunciada supone según los vecinos, "además de provocar graves daños ambientales, insalubridad y riesgos de carácter sanitario por el desbordamiento de las aguas fecales sin tratamiento ni depuración, las cuales discurren por nuestras calles y terminan en el litoral costero, siendo portadoras de un importante número de gérmenes patógenos que pueden producir diferentes enfermedades".
Los vecinos, en su demanda ante el juzgado, buscan que se "arbitre y ejecute proyectos e inversiones necesarias para solucionar el problema ambiental y sanitario que suponen estos vertidos, en cumplimiento de la normativa estatal autonómica y local". Además, piden que se "modifiquen y adapten los grandes colectores que no tienen capacidad para evitar los desbordamientos" y que se "construyan los tramos necesarios de red separativa de pluviales y fecales para evitar así los desbordamientos en la zona sur, la más castigada de la ciudad".
Por otro lado, también reclaman que se "construyan los depósitos antitormenta o cámaras de retención que la normativa exige en todas las estaciones de bombeo que existen para evitar que viertan al mar aguas residuales sin depurar, por diferentes circunstancias y con total impunidad (episodios de lluvias, averías, mantenimiento, falta de capacidad, aumento de población…)", entre otras cuestiones.
