El Patronato de Turismo Alicante City&Beach colabora con la campaña “Alicante para entrar a vivir” que ha lanzado la Asociación Provincial de Promotores de Vivienda de Alicante (Provia) para captar turismo residencial en la ciudad de Alicante. El objetivo es potenciar el turismo residencial de compra y alquiler de largas temporadas en nueve comunidades autónomas (Madrid, País Vasco, Castilla La Mancha, Castilla León, Asturias, La Rioja, Navarra, Murcia y la Comunidad Valenciana), así como en Holanda.

La vicealcaldesa y responsable del Patronato de Turismo Alicante City&Beach, Mari Carmen Sánchez, ha señalado que “se trata de una campaña original que abre la puerta, nunca mejor dicho, a potenciales compradores de vivienda, así como a inquilinos de larga estancia con el foco puesto en la calidad de vida de la que disfrutamos en nuestra ciudad”.

Por su parte, el secretario general de Provia, Jesualdo Ros, ha explicado que el “objetivo que perseguimos con esta campaña es la promoción del turismo residencial en la ciudad de Alicante y en todas sus formas: segunda residencia, alquileres, o incluso el coliving”. “El medio online nos permite llegar a un público objetivo que se mueve y busca diferentes formatos de alojamiento a través de Internet”, ha añadido.

“Nos dirigimos al cliente nacional, un mercado ya maduro para la ciudad, y al holandés, un mercado que, aunque no es el principal, hemos detectado que crece año tras año y que esta campaña ayudará a reforzar”, ha señalado Ros.

La campaña se desarrolla, en español y en neerlandés, en formato online hasta el próximo mes de septiembre. Los canales en los que se lleva a cabo son medios de comunicación digitales, Facebook y Google para poder llegar al público objetivo. La previsión es superar 1,2 millones de impactos. Además, la campaña incluye un vídeo de 30 segundos para facilitar su visualización y viralización en el que se pueden ver diferentes puntos emblemáticos de Alicante con un mensaje que finaliza con un “Alicante para entrar a vivir”.

El turismo residencial se ha convertido, prácticamente y utilizando un símil bancario, en un sector «sistémico» (su eliminación afectaría al conjunto de la producción de la provincia) para la economía de la Costa Blanca, al mover hasta 2019 un total de 12.000 millones de euros al año, de los que seis mil millones corresponden al gasto de los extranjeros que tienen su segunda residencia en la provincia, y otros seis mil al movimiento económico de la compraventa de apartamentos, villas y chalets. La actividad representaba el 17% el PIB. La venta de viviendas a extranjeros y turistas españoles mantiene 96.000 empleos al año y una actividad que ayuda a la desestacionalización y concentra el 60% del gasto turístico, según Provia.

Los promotores detectan, además, que en los últimos meses que la Costa Blanca ha cogido ritmo en la construcción de segunda residencia gracias, paradójicamente, a dos factores en teoría contrapuestos: por un lado el avance en el final de la restricciones y, por el otro, en que muchos compradores del centro y norte de Europa han decidido invertir en vivienda convencidos de que es mejor parar un confinamiento por el covid o cualquier otro virus que pueda surgir que en sus ciudades de origen con quince grados menos de temperatura, según apuntan desde Provia. Influyen también los bajos tipos de interés y el hecho de que el ladrillo vuelva a tener fuerza como refugio del capital.