El aeropuerto de Alicante-Elche se integra en un nuevo sistema de control europeo que reduce los retrasos

El aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández ha completado con éxito el proceso de integración en el programa ‘Airport-Collaborative Decision Making’, un nuevo sistema de trabajo para optimizar la gestión de sus operaciones. El programa A-CDM es una iniciativa conjunta de ámbito europeo auspiciada por Eurocontrol, ACI-Europe (Airports Council International), CANSO (Civil Air Navigation Services Organisation) e IATA (International Air Transport Association) para mejorar la eficiencia de las operaciones aeroportuarias, reduciendo demoras, incrementando la predictibilidad de las operaciones y optimizando la asignación de recursos.

Este proyecto supone un cambio radical en la que hasta ahora era la forma habitual de trabajo de los aeropuertos europeos, algo que ya avistó el aeropuerto alicantino cuando se certificó como primer aeropuerto "Torre Avanzada” de España en 2016, poniendo rumbo a un cambio de modelo de trabajo que ha culminado con la implantación del sistema A-CDM, según Aena.

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Para lograr una mayor agilidad y eficiencia en la gestión de sus recursos, los principales agentes implicados en las operaciones aeroportuarias de los aeropuertos CDM se comprometen a una mayor permeabilidad en la operativa de cada vuelo, apostando por la toma de decisiones conjunta mediante la puesta en común de la información de que dispone cada uno de ellos.

El aumento en la calidad de la información que aportan todos los intervinientes, con datos actualizados y precisos, que anteriormente no eran de conocimiento mutuo, permite incrementar la predictibilidad de las operaciones, reducir demoras y optimizar los recursos aeroportuarios, entre ellos, la disponibilidad de estacionamientos para aeronaves y la capacidad de la pista de vuelo.

La optimización de las operaciones del aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández, gracias al modelo A-CDM, adquiere mayor relevancia al tratarse del primer aeropuerto de la red de Aena que se integra en el sistema con una sola pista y un volumen de operaciones de más de 100.000 vuelos en 2019 y que supera los 84.000 movimientos desde enero hasta noviembre de 2022.

Además, se podrá disminuir el coste de los movimientos en tierra derivado de un menor gasto de combustible al reducir los tiempos de rodaje y espera en cabeceras, lo que repercute también en el medio ambiente y atenúa el impacto ambiental.

Las compañías aéreas y los agentes de ‘handling’ dispondrán de datos con mayor antelación, podrán hacer una mejor planificación de los trabajos y una asignación más eficiente de sus medios, tanto humanos como materiales.

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En cuanto a los pasajeros, el beneficio también es importante puesto que mejorará la puntualidad, se incrementará la satisfacción de los usuarios, se reducirán las conexiones perdidas y dispondrán de mejor información y servicio durante periodos de incidencias.

Los estudios realizados por Eurocontrol demuestran que el modelo A-CDM permite realizar una mejor gestión y recuperación de periodos con condiciones adversas como puede ser la mala meteorología y la regulación de vuelos asociada a esta circunstancia u otras casuísticas, lo cual supone un beneficio directo para los viajeros afectados.

En la actualidad, además de la infraestructura alicantina, entre los aeropuertos europeos en los que el programa A-CDM está totalmente implantado se encuentran: Ámsterdam, Bérgamo, Berlín Brandenburgo, Bruselas, Copenhague, Düsseldorf, Frankfurt, Ginebra, Hamburgo, Helsinki, Lisboa, Londres Heathrow, Lyon, Milán Malpensa, Milán Linate, Múnich, Nápoles, Niza, París CDG, París Orly, Oslo, Praga, Riga, Roma Fiumicino, Stuttgart, Venecia, Varsovia y Zúrich (en orden alfabético).

En España, en la red de Aena, además de en Alicante-Elche Miguel Hernández, el A-CDM está incorporado en los aeropuertos Adolfo Suárez Madrid-Barajas, Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, Palma de Mallorca y Málaga-Costa del Sol.