Avisos por tormentas el viernes en el interior de la provincia de Alicante

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) acaba de activar el aviso amarillo para el próximo viernes 12 de mayo por tormentas, que estarán acompañadas de lluvia fuerte y granizo en el interior de la provincia de Alicante. Concretamente en las comarcas del Alto Vinalopó y parte del Medio Vinalopó, l'Alcoià y l'Alacantí.

La probabilidad es alta, entre el 40 y el 70%, y el riesgo queda acotado entre las 14 y las 24 horas del mismo viernes.

No obstante este jueves seguirán bajando las temperaturas, tanto las mínimas como las máximas. Estas últimas se situarán cercanas ya a los 20 grados centígrados en una jornada muy nubosa y con probabilidad de precipitaciones, incluso de carácter tormentoso, sobre todo en la segunda mitad del día.

La provincia de Alicante podría sufrir una frontólisis en los próximos días

Cada vez se ajustan más los parámetros meteorológicos ante el cambio de tiempo que se espera en la provincia a partir de este jueves. También el descenso de las temperaturas previsto amplía cada vez más la probabilidad de lluvias de cara a los próximos días. Una circunstancia que se debe a la entrada de la «vaguada retrógrada» que los meteorólogos vienen anunciando desde el martes, tal y como este diario publicó ayer, a la que dan una posibilidad muy alta de que afecte a la vertiente mediterránea. En este caso la llegada de lluvias a la provincia permitirá aliviar la prolongada sequía, pero si llega acompañada de pedrisco los daños en la agricultura podrían ser cuantiosos en esta época del año.

El abril más cálido y seco de los últimos 62 años

La Agencia Estatal de Meteorología también decretó la alerta amarilla el pasado domingo por el riesgo de que se produjeran tormentas que podrían ir acompañadas de granizo. También en ese caso las lluvias se localizaban en el interior de la provincia de Alicante y se advertía de que podrían descargar en cualquier momento a partir del mediodía, sobre todo durante las primeras horas de la tarde. El aviso se mantuvo hasta última hora del día pero bajando la probabilidad al final de la tarde y por la noche. La predicción se cumplió y la lluvia fue totalmente irregular tanto en su cantidad como en su radio de acción.

La tierra donde soplan todos los vientos

En Salinas, por ejemplo, los chubascos tormentosos llegaron a dejar acumulando cercanos a los 10 litros por metro cuadrado. Pero en líneas generales los registros pluviométricos oscilaron entre los 2 y los 8 litros por metro cuadrado en las comarcas del Alto y Medio Vinalopó, con temperaturas máximas que apenas llegaron a los 25 grados centígrados. En Castalla cayó granizo mientras que en la vecina localidad de Onil, situada a tres kilómetros de distancia, ni siquiera llovió. Un grado de irregularidad atmosférica que podría repetirse mañana en el interior de la provincia.