Así quedará la playa de la Almadraba de Alicante tras el proyecto de regeneración

La Junta Local de Gobierno ha aprobado este martes el proyecto de regeneración de la playa de la Almadraba que saldrá a licitación por 5,8 millones y que cuenta con financiación de los fondos europeos Next Generation dentro de los Planes de Sostenibilidad Turística presentados por el Ayuntamiento de Alicante. Eso sí, desde el gobierno local no han aclarado si la financiación de este proyecto se recoge en el presupuesto de 2024, ahora en fase de fiscalización de Intervención. Los proyectos que concurrieron a esta financiación fueron presentados por el Patronato de Turismo de Alicante al área de Coordinación de Proyectos que gestionó su tramitación. En el caso de la playa de la Almadraba el desarrollo lo lleva a cabo la Concejalía de Urbanismo.

El presupuesto asciende a 5.784.552 euros, de los que los fondos Next Generation aportan 1.186.825 euros para las actuaciones de adaptación al cambio climático y 200.000 euros para las destinadas a restauración ambiental.

Este proyecto consiste en la regeneración ambiental de la Almadraba, al tiempo que crea nuevos espacios de esparcimiento en un área de actuación de 25.000 metros cuadrados. Los objetivos turísticos pasan por desconcentrar los flujos de las playas urbanas al ofrecer otro lugar de excelencia en un arenal cercano y adaptar la ciudad al cambio climático.

El proyecto de Urbanización del Entorno de la Almadraba, redactado por el Grupo Aranea, prevé diversas actuaciones para mejorar las características de movilidad, accesibilidad y seguridad, así como la puesta en valor del patrimonio cultural donde se encuentra el yacimiento de “La Almadraba-Camping Bahía”, que se podrá recorrer con los elementos existentes identificados y explicados.

Además, se crea un sistema sostenible de drenaje en caso de lluvias fuertes que permiten reducir la velocidad del agua de escorrentía, canalizando sus recorridos. Para ello se construirá un aljibe de 786 metros cúbicos con la función de retención de las lluvias y su posterior vertido a la red, así como un canal abierto que permita minimizar los arrastres a la playa y un canal filtrante.

En paralelo, se realizará una restauración paisajística y renaturalización para generar un espacio más atractivo con nueva vegetación y con una actuación de conservación de la ya existente, al tiempo que se modificará la topografía para conseguir recorridos peatonales accesibles. Las calles Corbeta y Almadraba se peatonalizan para potenciar el carácter de parque situado junto al mar y con ello mantener su esencia de espacio natural dotado con mobiliario urbano, zonas de descanso, juegos infantiles, lavapiés, fuentes, aparcabicis, pasarelas de madera y de hormigón, sillas y bancos. Aprovechando la actuación, se renovará el colector existente.

Además, se trasladará el quiosco situado en Dominio Público Marítimo Terrestre a una zona verde acondicionada con el objetivo de activar el espacio público generado y se sustituirá el edificio de servicios del Ayuntamiento existente para evitar su impacto visual actual por una pieza semienterrada con una cubierta vegetal.

La concejala de Urbanismo, Rocío Gómez, ha destacado que “se trata de una gran actuación que va a cambiar por completo la playa de la Almadraba mejorando todo su entorno”. “Este espacio va a ganar en sostenibilidad y accesibilidad creando una zona de paseo que se incorpora para el disfrute de los ciudadanos”, ha concluido.

La edil ha precisado que ya se está trabajando en la redacción de los pliegos, por lo que las obras podrían comenzar de cara al próximo verano y su plazo de ejecución es de diez meses.