La situación de los pantanos aboca a la provincia de Alicante a la declaración de sequía permanente

La cuenca del Segura se encuentra al 18 % y constituye este viernes la comisión que deberá tomar las medidas de emergencia ante la escasez de agua

Imagen del pantano de La Pedrera en Orihuela.

Imagen del pantano de La Pedrera en Orihuela. / Tony Sevilla

J. A. Martínez

J. A. Martínez

Al borde de la declaración de sequía permanente. Los pantanos de la provincia de Alicante continúan su curva descendente y acercan cada vez más a la provincia de Alicante a la adopción de medidas extraordinarias ante la falta de agua. Los pantanos de la cuenca del Segura continúan su imparable curva de descenso, mientras que en la cuenca del Júcar se da la circunstancia de que, aunque ganan en reservas, los embalses ubicados en la provincia de Alicante continúan en situación de números rojos, con una situación crítica en la Marina Baixa.

Los embalses del Segura están ya al 18,07 por ciento de su capacidad, con 206 hectómetros cúbicos embalsados, en otra semana con balance negativo y con ausencia de precipitaciones. El viernes se constituirá en la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) la Comisión Permanente de la Sequía. Sobre el papel, en esta reunión se van a elegir a los vocales con derecho a voto dentro de la comisión. Sin embargo, entre las comunidades de regantes no se descartaba que pudieran ya empezar a adoptarse las primeras medidas extraordinarias como la puesta en marcha de los pozos de sequía. Esta misma semana, la Confederación debe reevaluar el estado actual de la sequía y decidir si se pasa de una situación de alerta por sequía a otra de sequía extraordinaria y que supondría endurecer las restricciones. En estos momentos las restricciones en marcha afectan al regadío.

Fuentes de la CHS señalaron que para la modificación del estado de sequía no se dependía sólo del estado de los pantanos, sino que se contaba con otros recursos como el agua del trasvase Tajo-Segura y los procedentes de las desaladoras. A éstos se sumarían las aportaciones de los pozos de sequía que podrían ponerse en marcha en marzo y que supondrían cerca de 32 hectómetros cúbicos al año. La valoración de todas estas fuentes marcarían la estrategia que se debe seguir.  La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) ha convocado a las entidades locales, agentes socioeconómicos y en defensa de intereses medioambientales que integrarán la Comisión Permanente de la Sequía, para analizar y realizar propuestas ante "el escenario de sequía extraordinaria" que se prevé en marzo.

Esta semana los pantanos de la cuenca del Tajo han arrojado un balance negativo, pero tanto en el embalse de Entrepeñas como en el de Buendía, de los que dependen las aportaciones del trasvase Tajo-Segura, los recursos hídricos han crecido esta semana. El viernes, tal y como publicó este diario, se aprobó por el Gobierno un nuevo trasvase de 20 hectómetros cúbicos del Tajo-Segura correspondiente al mes de enero. En España, la reserva hídrica ha crecido hasta el 50,8 % de su capacidad.

Confederación del Júcar

Por su parte, en la cuenca del Júcar, aunque las reservas han crecido en 28 hectómetros cúbicos una semana y se cuenta con 1.367, la situación sigue siendo crítica en la Marina Baixa. El Amadorio está al 18,75 por ciento con tan solo tres hectómetros cúbicos embalsados y el de Guadalest se mantiene con 6 hm al 46,15 por ciento. La situación no es mejor en Beniarrés, donde el agua embalsada es el 25,93 % y asciende a siete hectómetros.

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