Menores duermen en colchones en los pasillos al estar el centro de acogida de Alicante al doble de su capacidad

Educadores y sindicatos alertan del colapso en las instalaciones por la llegada de niños en pateras y la entrada de menores de los cupos que envía el Gobierno desde Canarias que tienen que dormir en colchones en el suelo

La Generalitat afirma que no se ha creado ninguna plaza en ocho años y que se están haciendo traslados a otros centros para aliviar la situación

El centro de menores con problemas de capacidad en Alicante

El centro de menores con problemas de capacidad en Alicante / Héctor Fuentes

J. Hernández

J. Hernández

Los educadores del Centro de Recepción de Menores "Alacant", dependiente de la Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, han presentado un escrito ante el Colegio de Educadores Sociales de la Comunidad Valenciana en el que exponen la situación en que se encuentran las instalaciones, al doble de su capacidad. Este centro puede albergar a 24 niños, niñas y adolescentes repartidos entre dos grupos (chicos mayores de 13/14 años y chicas y niños menores de 13 años en otro grupo) pero sin embargo se encuentra desde hace semanas con una ocupación de más de 50 niños, niñas y adolescentes. Esta circunstancia provoca que los menores tutelados estén durmiendo en pasillos y en salas no destinadas a tal fin en colchones en el suelo repartidos por distintas estancias.

Esta situación es más habitual en los meses de verano debido a la gran afluencia de pateras llegadas principalmente de Marruecos y Argelia. Pero debido al buen clima y otras circunstancias, esta vez no ha cesado la afluencia, según fuentes próximas al centro. A esto se debe añadir la constante entrada de adolescentes desde las islas Canarias, tras el acuerdo de reparto de menores por la crisis migratoria, procedentes de Senegal, Gambia o Malí.

Educadores y sindicatos afirman que no es una situación puntual sino que se arrastra desde hace casi dos meses "sin que la Generalitat haya dado solución alguna.

Conselleria

Desde la Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda explican que "nos encontramos en esta situación por varias razones: una, la llegada de menores en pateras; por otro lado nos están llegando, procedentes de Fiscalía, menores que han entrado en la Comunidad en los cupos de adultos enviados por el Gobierno de España, que tras hacerles la prueba de la muñeca se ha detectado su minoría de edad. Una cuestión que ha sido denunciada al Gobierno de España desde hace semanas". 

La Generalitat recuerda además que en el centro de recepción Alacant no se ha creado ninguna plaza en los últimos 8 años, por lo que los centros están tan tensionados que en las últimas semanas se han visto desbordados. 

"Ante la situación actual se ha reforzado el personal, se han adecuado las instalaciones y se están tomando medidas para buscar una solución a este problema. Entre las medidas, ya se ha trasladado a otros centros a un grupo para descongestionar el centro y esta misma semana se va a realizar el traslado de otro grupo de un número importante de menores", aseguran desde el gobierno autonómico.

Burocracia

Sea como sea, en el escrito de los educadores se habla de la lentitud de la burocracia que "no ayuda a paliar el problema. Si el menor es extranjero, hasta los tres meses no se suele aplicar ninguna medida. Esto se hace porque como muchos utilizan los centros como lugares de paso para llegar a Barcelona o Francia, empiezan a hacer un recorrido de fugas y para evitar la duplicidad de expedientes se les aguanta tres meses".

También hay otros menores, abundan, que vienen a causa de que su ayuntamiento les ha derivado a través de los servicios sociales. En esos casos tienen que permanecer 45 días en el centro, algo que "no sucede en la práctica, ya que algunos están hasta tres meses pese a estar en guarda provisional".

"A todo esto debemos añadir el problema de la falta de recursos, tanto humanos, económicos y materiales. Los trabajadores de la residencia no tienen ropa que ofrecer a los adolescentes: ni ropa interior, ni pijamas, chándal o lo mínimo para cubrir sus necesidades básicas", abundan en el escrito.

Falta de personal educador

La falta de personal educador es otra barrera, añaden las fuentes, puesto que "no se puede realizar una intervención directa con los adolescentes o niños. Simplemente los educadores pueden realizar una intervención asistencial y de cuidados básicos".

A las quejas de los educadores se les suele responder que todos los centros, pisos o demás donde se pueda derivar a los residentes, están colapsados o que no hay plazas.

Imagen de colchones en los que duermen los menores

Imagen de colchones en los que duermen los menores / INFORMACIÓN

"Si a esto añadimos que el personal que está realizando sustituciones o con contratos de 21 días, lleva unos meses sin cobrar o cobrando la mitad del sueldo etc;"o que el dinero semanal que debe recibir la residencia para los gastos de mantenimiento como son alimentación, aseo e higiene y también el dinero que se les ofrece a los niños, niñas y adolescentes, que tampoco llega (a cada grupo de residentes, se les deben alrededor de 1.000 € por grupo en concepto de pagas, material que compran los educadores de su bolsillo y después pasan una justificación de gastos, recargas de bonobus para desplazamientos a policía o a juzgados etc…) la situación cada vez está siendo más insostenible".

UGT apunta también que los menores están durmiendo encima de colchones sobre el suelo porque no hay capacidad. El sindicato denuncia "la falta de recursos y las condiciones de los trabajadores que no dan abasto. Aparte de que están al doble de su capacidad no hay medios, y llevan así tiempo", señala Manuel Abela, delegado de Servicios Públicos sector Autonómicas.

Desde CC OO explican que este centro tiene la finalidad de proporcionar alojamiento y manutención (de manera temporal) a los menores de edad que se encuentran bajo su tutela.

Instalaciones deficientes

El sindicato señala que las instalaciones se encuentran muy deterioradas, son antiguas y están pendientes de reforma, con agujeros en las paredes, puertas rotas e insuficiente agua caliente pues no llega a la planta superior según indican trabajadores. Las instalaciones no están preparadas para poder alojar tan alto número de personas y se muestran claramente deficientes.

CCOO denuncia que la plantilla del centro se encuentra desbordada y manifiesta no poder atender adecuadamente las necesidades básicas de los menores. Además temen que el número de usuarios pueda seguir aumentando. Por todo esto, el sindicato exige soluciones con carácter urgente y señala que no dudará en seguir adelante con otras medidas en caso de que fuera necesario.