Importante de Mayo

Sara Navarro. Diseñadora de calzado. «En mi vida no sabría decir dónde termina el mundo de la moda y dónde empieza el del arte»

Con los pies en su tierra. La historia de Sara Navarro no es la de la casualidad, sino más bien la de la determinación, la constancia y el trabajo duro en busca de un sueño. La diseñadora eldense sacó a relucir sus orígenes zapateros para terminar calzando a la princesa Leonor, la infanta Sofía o Anne Igartiburu, entre muchas otras personalidades. Además, ha colaborado con diseñadores como John Galliano y Victorio & Lucchino.

Arantza Sarasola, vicepresidenta de Prensa Ibérica, y la diseñadora eldense de calzado Sara Navarro.

Arantza Sarasola, vicepresidenta de Prensa Ibérica, y la diseñadora eldense de calzado Sara Navarro.

A.J.F.

Pese a llevar toda una vida dedicada al diseño de calzado; haber vestido a la princesa Leonor, la infanta Sofía o Anne Igartiburu; haber colaborado con diseñadores de la talla de John Galliano y Victorio & Lucchino; y haber expuesto su obra en diversas muestras de arte; Sara Navarro cree que «siempre quedan muchas cosas por hacer» y ya piensa en su próxima meta.

La diseñadora eldense ha sido reconocida con el premio «Importante» del mes de mayo después de una dilatada y reconocida carrera en la que siempre ha hecho gala de sus orígenes y de su tierra, llevando el nombre de la provincia de Alicante mucho más allá de nuestras fronteras, siempre con paso firme y decidido.

Para Navarro, recibir ahora este reconocimiento ha significado «un grandísimo honor además de una responsabilidad» ya que «los premios son siempre una motivación pero, de alguna forma, son también la obligación de cumplir ciertas expectativas. Para mí, es un estímulo para seguir adelante, adaptarme a los nuevos tiempos y continuar evolucionando».

Esos nuevos tiempos, según la diseñadora eldense, serán una oportunidad para echar la vista atrás y «evaluar de alguna manera la trayectoria de todos estos años». A partir de ahora, considera que se abre un nuevo panorama en su sector, en el que todo ha cambiado: «Cuando yo empecé, era muy importante la internacionalización. Ahora mismo, te diría que no puede haber ninguna empresa que sobreviva si no incluye en su identidad la sostenibilidad, la economía circular y los avances de la tecnología, el momento actual está tremendamente centrado en esos aspectos». Pero para abrazar el futuro es indispensable saber bien de dónde se viene. Navarro, que siempre ha mantenido un vínculo muy importante con sus orígenes: representa la tercera generación de una tradición familiar que inició su abuelo y prosiguió, más adelante, su padre, fundador de la marca Kurhapies. La empresa familiar llegó a contar con más de 150 trabajadores que producían unos 1.000 pares de zapatos al día. Además, defensora de los productos de proximidad: siempre ha mantenido su producción en Elda, incluso en los peores momentos para el sector del calzado, cuando muchas empresas de la zona optaron por derivar la producción a fábricas de Asia, con el objetivo de abaratar costes.

«Creo que es fundamental valorar todo lo que tienes que te hace diferente», revela, «Alicante es la provincia por excelencia en la realización de calzado de una muy alta calidad, eso nos hace únicos no solo en Europa, sino en todo el mundo».

Por lo que respecta a ese futuro que cada vez está más próximo, Navarro considera que «todavía hay mucho que no he hecho y a lo que quiero atreverme: aprovechar mi experiencia en el sector y en el diseño para transmitir conocimiento es una de esas cosas». La diseñadora también destaca su estrecha relación con el arte: «Tengo una gran afición al mundo del arte, siempre he coleccionado obras y para mí representa una fuente de inspiración constante y a la que acudo de forma muy recurrente». En esta línea, Navarro afirma que, en su caso particular, «no sabría decir dónde termina el mundo de la moda y dónde empieza el del arte porque siempre he convivido de forma bastante equilibrada entre los dos: he visitado tantas galerías y exposiciones como desfiles y ferias».