El Ayuntamiento de Crevillent y el Consell cierran filas para desbloquear el Teatro Chapí

Las instalaciones están a expensas de que la Conselleria de Cultura recepcione las obras, y la alcaldesa pide financiación para conseguir los equipamientos que faltan

El encuentro mantenido entre los responsables municipales y de la Conselleria de Cultura

El encuentro mantenido entre los responsables municipales y de la Conselleria de Cultura / INFORMACIÓN

J. R. Esquinas

J. R. Esquinas

El Ayuntamiento de Crevillent y el Consell están dispuestos a cerrar filas para tratar de desbloquear la sItuación del Teatro Chapí, que pese a contar con las obras prácticamente terminadas necesita equipación y una plataforma hidráulica para elevar a las orquestas. Así se puso de manifiesto en la reunión que mantuvieron este miércoles la alcaldesa, Lourdes Aznar, con el vicepresidente y conseller de Cultura, Vicente Barrera. Un encuentro al que también asistieron la directora autonómica de Patrimonio Cultural, Pilar Tébar, así como la concejala de Cultura, Mónica San Emeterio; la primera teniente de alcalde, María Gema Escolano; y el edil de Patrimonio, Antonio Candel; y el concejal de Presidencia, Pedro García Magro.

Tras el encuentro, la alcadesa puso el acento en que la reunión sirvió para “mostrar el firme compromiso de la conselleria para desbloquear la situación del Teatro Chapí”. Un desbloqueo que, como recordó, pasa por solucionar el problema administrativo que existe por la falta de recepción de las obras por parte de la conselleria, ya que se realizaron trabajos no contemplados en el proyecto sin tramitar administrativamente la correspondiente modificación de proyecto.

Aznar, en este sentido, añadió que, “una vez se dé el visto bueno desde la Intervención General de la Generalitat Valenciana, se recepcionará la obra y se iniciará la licitación de la plataforma hidráulica, porque según la regidora sí existe presupuesto reservado para ello en la conselleria, pese a que hace tan sólo una semana Acord per Guanyar reprobaba precisamente que esta infraestructura quedaba fuera de las cuentas autonómicas para 2024 y que PP y Vox habían votado en contra de una enmienda de Compromís en las Cortes para incluir la infraestructura.

Si bien, la alcaldesa avanzó que en la reunión se trató la posibilidad de que Generalitat pudiera financiar el resto de la obra, incluyéndola en los presupuestos, para así conseguir los equipamientos que le faltan a la instalación. “El compromiso nos lo han mostrado y van a estudiarlo de forma prioritaria”, resaltó Lourdes Aznar.

Por su parte, el vicepresidente y conseller de Cultura, Vicente Barrera, señaló que la intención es intentar arrancar ese proyecto "que lleva demasiado tiempo parado para que, lo antes posible, Crevillent tenga terminada esa obra que tanto se merece”. Además, el vicepresidente apuntó que “es una reivindicación que no tiene color político, es de todo el pueblo y, con nuestra responsabilidad y con las limitaciones que siempre tenemos porque aquí el dinero manda, vamos a trabajar de la mano del Ayuntamiento para hacer posible ese logro".

Desde su toma de posesión como alcaldesa, tras las elecciones del 28M, la alcaldesa siempre ha sostenido que faltan 2,8 millones de euros en equipamiento para el Teatro Chapí, ya que en alguna ocasión llegó a señalar que sólo se ha ejecutado el "esqueleto" y faltan dotaciones, al tiempo que alerta que las instalaciones arrastran graves problemas administrativos, lo que está impidiendo que el teatro pueda abrir sus puertas. Todo pese a que en el verano de 2022 la entonces consellera de Cultura, Raquel Tamarit (Compromís), apuntó al primer trimestre de 2023 como fecha para la apertura del Teatro Chapí de Crevillent. En ese momento, de hecho, las obras para levantar la infraestructura se encontraban en un estado avanzado después de que se iniciasen las obras en 2020, coincidiendo con la pandemia de coronavirus.

Acord per Guanyar (confluencia de izquierdas que gobernaron en el pasado mandato) destacaron apenas días después de la investidura que el anterior ejecutivo dejó presupuestada una partida de 800.000 euros para acometer el equipamiento contemplado para la primera fase para mobiliario, iluminación y sonorización.

Sobre los problemas administrativos, desde Compromís, ya en la oposición, reprobaron que si se habían producido graves problemas administrativos y jurídicos era porque el PP dejó en un cajón el proyecto durante más de una década. Entonces justificaron que el anterior equipo de gobierno (Compromís, PSOE y l'Esquerra) había solicitado algunas modificaciones para adaptar el proyecto a las necesidades de Crevillent para aumentar el tamañao de las butacas, contemplar ascensor en lugar de montacargas y la plataforma hidráulica del foso de la orquesta.