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La Conselleria de Infraestructuras estudia en la actualidad dos proyectos para la conexión de Alcoy y Benidorm a través de la CV-70. Ambas localidades quedarán unidas por la nueva vía, que permitirá hacer el trayecto en menos de una hora de duración. Los dos proyectos, según avanzó ayer el conseller Mario Flores, tienen que ver con el túnel previsto a la altura del puerto de Confrides. El proyecto inicial planteaba una construcción de mil metros de longitud, pero según Flores también se analiza la conveniencia de un túnel más largo.

Las obras de esta carretera, que deberían comenzar este mismo año según la previsión del Consell, suponen una inversión de unos 82 millones de euros. "Se optará por el trazado que tenga mayor consenso" dijo Flores, quien recordó que para ello se abrió un plazo de participación pública para los vecinos. Una vez finalizada la vía, los vehículos que circulen por ella podrán alcanzar velocidades de 100 kilómetros por hora, lo que unirá Alcoy y Benidorm en "bastante menos de una hora" añadió Flores.

Al margen de ese proyecto, el conseller aludió asimismo al estado actual de esa vía, cortada entre los municipios de Polop y Benimantell desde hace dos meses a causa del hundimiento del firme como consecuencia de las lluvias. Flores explicó que el alcance de esas obras será mayor al esperado inicialmente, por lo que se elabora en estos momentos un proyecto por la "vía de urgencia". Recordó que se trata de un "tramo importante" y que la intención es iniciar las obras lo antes posible", ya que en la actualidad los habitantes de Benimantell y municipios de la montaña tienen que dar un gran vuelta para llegar al municipio.

Por otro lado, Flores se reunió ayer en Madrid con responsables de Fomento para estudiar el plan ferroviario, que "está muy adelantado y que contiene, además del AVE, el tren de la costa y la red de cercanías de las tres provincias".