El concejal de Educación de Alicante, Antonio Ardid, cree que deben ponerse en marcha campamentos de verano integradores, es decir, no sólo para niños de familias con escasos recursos, porque de lo contrario podrían generarse discriminaciones. El edil cree que no sería bueno generar «comedores para pobres», sino que la idea pase por contribuir además a la conciliación laboral y familiar.

De momento, Alicante no tiene previsto abrir comedores escolares este verano, aunque tampoco lo ha descartado, como aseguró ayer Ardid, quien está a la espera de la reunión hoy sobre este tema que se celebrará en la Conselleria de Bienestar Social en Valencia.

Elche en cambio sí tiene previsto abrir al menos dos comedores escolares en la ciudad. En estos momentos está estudiando si hacen falta más. El edil de Educación ilicitano, Daniel McEvoy, indicó que en cualquier caso serán comedores para niños en riesgo de exclusión social.

Por otra parte, Antonio Ardid mantuvo ayer una reunión con representantes de directores de colegios de Alicante para informarles de que el próximo año podrán repartirse hasta 60.000 euros de las arcas municipales para ayudas complementarias a las de las distintas becas de la Generalitat para aquellas familias en circunstancias especiales, como numerosas o sin recursos. Las ayudas se abonarán a los centros y éstos las repartirán a las familias. Las mismas se podrán solicitar a partir del 1 de octubre, indicó Ardid.