Benidorm planta a Vaersa y estudia llevar sus basuras directamente a El Campello tras una nueva subida de precios

El Ayuntamiento incluye en el nuevo pliego saltarse el paso intermedio y usar sus vehículos para trasladar los residuos al vertedero de l'Alacantí, para ahorrarse casi 1,1 millones al año. El precio que la empresa pública cobra por el servicio es un 21,28% más caro que en Dénia

La planta de transferencia de Benidorm, donde los municipios depositan sus residuos para llevarlos hasta la planta de El Campello en camiones más grandes.

La planta de transferencia de Benidorm, donde los municipios depositan sus residuos para llevarlos hasta la planta de El Campello en camiones más grandes. / David Revenga

R. Pagés

R. Pagés

«Quieren ganar dinero a costa de los ayuntamientos, cuando la empresa pública está para prestar un servicio, no para enriquecerse». El Ayuntamiento de Benidorm ha sido el primero en alzar la voz contra la nueva subida de precios aplicada para este año por Vaersa, la empresa pública dependiente de la Consellería de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, en la planta de transferencia de Benidorm.

Esta planta es el lugar al que trasladan sus basuras buena parte de los municipios de la Marina Baixa para ser cargadas en camiones de mayor tamaño antes de su traslado a El Campello, donde está la planta de eliminación.

En concreto, el incremento fijado es de un 5,40%, el equivalente a la variación interanual del IPC. Un porcentaje que, sin embargo, ha llevado al Consistorio benidormense a decir basta y a plantear la posibilidad de saltarse este paso intermedio, que no es de obligado cumplimiento para los municipios, y llevar directamente sus residuos al vertedero de El Campello, para reducir los costes en cerca de 1,1 millones al año

¿Por qué este monumental enfado? El gobierno de Benidorm, del Partido Popular, lleva desde octubre del pasado año intentando reunirse con Vaersa para buscar una solución negociada que no incremente más el peaje que tienen que pagar los municipios por la eliminación de sus residuos, que en los dos últimos años ya se ha encarecido un 35% para las 52 poblaciones que forman parte del Consorcio MARE: todas las de las dos comarcas de la Marina, además de El Campello. Sin embargo, en estos seis meses «no hemos obtenido respuesta», como asegura el edil de Limpieza Viaria, José Ramón González de Zárate. 

¿Qué es lo que se quiere negociar? Desde el área de Ingeniería municipal señalan que el precio fijado por Vaersa para 2022, que «establece unilateralmente esta empresa pública», fue de 18,88 euros por tonelada para la planta de Benidorm; mientras que en la planta de Dénia se cobraron 15,50 euros por tonelada. Dicho de otra manera: Vaersa cobra en Benidorm un 21,28% más caro el mismo servicio que presta en Dénia, cuando la planta de la ciudad turística se encuentra a 26 kilómetros de El Campello y la de la capital de la Marina Alta, a 70. 

Un camión accediendo a la nave de la planta de transferencia para descargar.

Un camión accediendo a la nave de la planta de transferencia para descargar. / David Revenga

Con la subida aplicada para este año, cada tonelada tratada en la planta de Benidorm costará a los municipios 19,96 euros. Y ello, a pesar de que a Vaersa no le costará ni un céntimo más, puesto que, según apuntan las mismas fuentes, el precio que paga la empresa pública por el transporte hasta la planta de El Campello seguirá siendo el mismo que el año pasado: 4,79 €/tn, ya que se trata de un precio «cerrado y sin posibilidad de revisión».

«Vaersa va a seguir pagando lo mismo que el año anterior por el traslado de los residuos, pero a los ayuntamientos nos va a cobrar un 5,40% más, lo que supondrá un claro beneficio para esta empresa pública a costa de la tasa que los ciudadanos pagan a sus ayuntamientos», lamenta González de Zárate. 

Sin ninguna ventaja

Desde Benidorm, además, reprochan que el Plan Integral de Residuos de la Comunidad Valenciana contempla compensaciones económicas para los municipios que alberguen instalaciones de valorización, eliminación y transferencia de residuos domésticos y asimilables, sin que hasta la fecha esta ciudad haya accedido a ninguna de estas compensaciones, al margen de poder utilizar parte del suelo de la planta como estacionamiento de los camiones que realizan la recogida de basura.

«Podría haber sido el momento de negociar alguna ventaja, pero Vaersa no se ha querido reunir con nosotros», mantiene el edil.

Ante todo ello, y de cara a la adjudicación del nuevo contrato de recogida de basura y limpieza viaria, el Consistorio ha incluido en los pliegos la opción de transportar directamente sus residuos a El Campello, como ya hace este municipio, La Vila Joiosa o Calp, lo que reduciría enormemente la actividad de la planta de Benidorm, puesto que casi el 60% de su producción proviene de la ciudad turística.

Otra imagen de la instalación a pleno rendimiento, donde se observa el foso y otro camión descargando basura.

Otra imagen de la instalación a pleno rendimiento, donde se observa el foso y otro camión descargando basura. / David Revenga

«Los cálculos realizados por los técnicos municipales evidencian que, con los vehículos contemplados en el nuevo contrato, más eficientes energéticamente, resultaría más barato el transporte directo a la planta del Consorcio, que utilizar los servicios de Vaersa, máxime si la futura transferencia de biorresiduos puede suponer un sobrecoste sobre el precio actual», apuntan desde el gobierno local. 

¿Para qué sirve una planta de transferencia?

La Planta de Transferencia de residuos de Benidorm empezó a funcionar el 15 de septiembre de 2000 y se encuentra ubicada dentro del Plan Especial Director de Usos e Infraestructuras (Pedui) de Terra Mítica. Básicamente, su función consiste en recibir los residuos recogidos por los vehículos de pequeña capacidad procedentes de los diferentes municipios y trasvasarlos a vehículos especiales de gran capacidad, con el fin de reducir los costes logísticos del transporte hasta la planta de El Campello.

En todo el ámbito el Consorcio 6-A1, que abarca a los 52 municipios de la Marina Baixa, Marina Alta y El Campello, solo existe otra planta de transferencia, ubicada en Dénia.

Aunque la mayoría de municipios hace uso de este servicio, no se trata de un paso obligatorio. De hecho, El Campello o La Vila Joiosa llevan los residuos directamente a la planta de valorización de El Campello, mientras que Calp, por su parte, tiene un servicio propio contratado para ello. A ellos podría unirse también Benidorm, una vez que se adjudique el nuevo contrato.

Desde el Consistorio benidormense apuntan que, a pesar de la inminencia de la implantación de este servicio y de que el Consorcio ya ha acondicionado sus instalaciones para ello, Vaersa no ha acometido hasta la fecha ninguna iniciativa para dar cobertura al mismo, dificultando a los ayuntamientos la posibilidad de cumplir con lo exigido por las leyes nacionales y comunitarias y exponiéndolos a sangrantes penalizaciones e impuestos.