La Vila educa a sus jóvenes para prevenir la violencia sexual por consumo de pornografía

Casi un millar de estudiantes de los tres institutos participan en un programa formativo para contrarrestar la desinformación en materia de sexualidad que recibe la juventud y la imitación de comportamientos violentos que ven en el porno. También se ha formado a familias y profesorado

Casi un millar de jóvenes han participado en este proyecto, encaminado a frenar la violencia sexual y la imitación de comportamientos violentos que ven en el porno.

Casi un millar de jóvenes han participado en este proyecto, encaminado a frenar la violencia sexual y la imitación de comportamientos violentos que ven en el porno. / INFORMACIÓN

R. Pagés

R. Pagés

El consumo de pornografía en edades cada vez más tempranas y la falta de una educación afectivo sexual en todos los niveles ha provocado que para muchos jóvenes sea difícil distinguir entre sexualidad y pornografía y, lo que es aún peor, sea incapaz de detectar cuándo se traspasa la línea roja del abuso y la violencia sexual. Así lo advierten decenas de expertos y muchos otros estamentos, que atribuyen el incremento de las agresiones sexuales en menores registrado en los últimos años guarda relación directa con la imitación de comportamiento violentos que los jóvenes están viendo en el porno.

Ante esta problemática, el Ayuntamiento de La Vila Joiosa ha querido dar un paso adelante y ha programado a distintos talleres dirigidos al alumnado, familias y profesorado dentro de un programa de prevención de la violencia sexual y de género por consumo de pornografía entre adolescentes, en el que han participado 928 estudiantes de entre 14 y 21 años de los tres institutos de Secundaria de la localidad: Malladeta, Marina Baixa y Marcos Zaragoza.

El proyecto, promovido por el Institut de les Dones, se ha puesto en marcha por primera vez este curso en los centros educativos de La Vila a través de la Concejalía de Servicios Sociales e Igualdad, con el objetivo de “poner en valor la necesidad de una educación afectivo sexual para contrarrestar la desinformación en materia de sexualidad que está teniendo el incremento del consumo de porno entre la gente joven”, ha explicado Asun Lloret, concejala de Servicios Sociales e Igualdad.

El mismo se ha desarrollado por medio de tres líneas de trabajo: alumnado, familias y profesorado. En el caso del alumnado, este curso se ha trabajado con los niveles de 3º y 4º de la ESO, Formación Profesional Básica y Ciclos Formativos del instituto Malladeta, con un total de 90 sesiones, dos por aula, en los que se ha abordado cuestiones relacionadas con la ausencia de la formación en materia de sexualidad, la necesidad de tener un espacio en el plantear sus dudas o cuestiones relacionadas con el sexo, el consentimiento como pieza clave en las relaciones familias, el impacto del consumo de pornografía entre los chavales o la relación entre pornografía, prostitución y trata de mujeres y menores.

Una de las sesiones formativas que se han desarrollado dentro de este programa, dirigido a alimnos, profesores y familia.

Una de las sesiones formativas que se han desarrollado dentro de este programa, dirigido a alimnos, profesores y familia. / INFORMACIÓN

Las otras dos áreas de trabajo han sido con el profesorado de los centros, con una sesión por cada instituto con la asistencia de 210 personas en total, en la cuales se les ha ofrecido información sobre recursos sobre educación afectivo sexual y se ha informado de algunas de las necesidades en este asunto detectadas entre su alumnado.

“Los chicos y chicas quieren hablar sobre sexualidad, necesitan aclarar sus ideas y que personal experto les diga qué hacer en situaciones en las que no saben qué hacer en sus relaciones, en sus maneras de entender su sexualidad o plantean dudas sobre cómo abordar su orientación sexual”, manifestó la edil de Servicios Sociales, quien aseguró que “es vital darles información y recursos donde seguir informándose porque las agresiones sexuales que han aumentado en los últimos años, tienen una relación directa según asegura la Fiscalía General del Estado, en la imitación de comportamiento violentos que los jóvenes están viendo en el porno”.

Por último, la tercera área de trabajo han sido las sesiones con las familias si bien, aunque la participación ha sido escasa –solo 36 personas de los tres institutos-, se han planteado muchos intereses comunes en materia de mejorar la formación sobre sexualidad de sus hijos e hijas en colaboración estrecha entre los educadores y las familias.

Fuentes municipales han explicado que la acogida del programa de Prevención de la violencia sexual y de género por consumo de pornografía entre adolescentes "ha sido muy buena", por lo que está previsto que el curso que viene vuelva a implementarse en los centros, con las mejoras planteadas a lo largo de esta primera experiencia.