Benidorm necesita 1.600 camareros para completar las plantillas de hostelería este verano

Los negocios locales se han puesto ya en marcha para ofertar los puestos de trabajo y llegar a la temporada alta sin problemas de personal | La falta de alojamiento asequible, entre los problemas que se encuentran los profesionales para aceptar ofertas

Un camarero atiende una terraza en Benidorm en una imagen de archivo.

Un camarero atiende una terraza en Benidorm en una imagen de archivo. / David Revenga

El verano está a la vuelta de la esquina y, con él, el inicio de una temporada estival que se prevé de récord. Y, como cada año, los establecimientos hosteleros de Benidorm se preparan para poder atender la gran afluencia de clientes que esperan en los meses de verano. Una tarea que no volverá a ser fácil. La capital turística necesitará 1.600 camareros para completar las plantillas para los próximos meses.

Así lo han confirmado desde la Asociación de Bares, Restaurantes, Cafeterías y Ocio Nocturno de Benidorm (Abreca) quienes explicaron que estas vacantes se corresponden con el periodo de más actividad en temporada alta, es decir, desde mitad de junio a finales de septiembre. O incluso hasta el puente de Octubre, ya que cada vez más negocios "alargan" la temporada hasta esas fechas.

La falta de profesionales cuando arranca la temporada no es nueva. En los últimos años, el sector hostelero ha visto como la demanda de camareros, cocineros, jefes de sala o ayudantes de cocina se incrementaba mientras la oferta caía. Un estudio publicado por Arcano Research concluía que en el periodo de 2019 a 2023, los bares y restaurantes españoles han perdido 32.000 empleados. Según algunas fuentes, la pandemia hizo que muchos profesionales de este sector dejaran ciudades como Benidorm donde tenían trabajo para volver a sus lugares de origen. Pasada la crisis sanitaria, muchos de ellos han desistido de volver detrás de una barra o coger de nuevo una bandeja y han optado por otros trabajos.

La búsqueda de camareros ya ha empezado para que puedan incorporarse a mitad de junio. Así lo corrobora Alex Fratini, empresario y miembro de Abreca: "Ahora se empieza a buscar para cubrir las vacantes de lo fuerte de la temporada". Todo con la vista puesta en completar todas las plantillas, porque si no, habrá que hacer ajustes como otros años que se traduce en menos horas abiertos o cerrar algún día más entre semana: "A ver si llegamos", indica el hostelero para que todo cuadre con una temporada estival que se prevé mejor que la de 2023.

Por una parte, esa demanda de camareros u otras especialidades se cubrirá con los estudiantes que, como cada verano, busquen un empleo para poder ganar un sueldo que les permita mantenerse el resto del año. En Benidorm es algo que se repite desde siempre. En una ciudad plenamente turística, los más jóvenes siempre han buscado un "trabajo de verano". Para muchos será su primer trabajo: "Hay quien tiene menos experiencia pero esto no es lo más importante".

Porque tras unos años en los que completar las plantillas en hostelería ha sido muy complicado, los hosteleros priorizan ya otras cosas a la hora de contratar nuevos camareros o similar. "Ya no nos fijamos tanto en si tienen experiencia o no, si hablan idiomas...", añade Fratini. Y, sobre todo, si hay actitud: "Es lo que pedimos, que tengan ganas de trabajar". También si tienen permiso de trabajo y "si tienen un alojamiento ya donde vivir". ¿Tan importante es esto último? Es clave.

Los precios de los alquileres están por las nubes. Así se desprende de uno de los últimos informes sobre esta cuestión donde se recoge que Benidorm es el municipio en el que los costes son más elevados para un arrendamiento, con una media de 16,76 euros. Lo que, unido a que muchos propietarios prefieren el alquiler vacaciones al de larga estancia, hace muy difícil que los trabajadores logren un hogar asequible. "Muchos vienen y se quedan primero en una pensión pero luego no encuentran alojamiento", explica Fratini. Lo que hace que en algunas ocasiones se vean obligados a renunciar al puesto que han ocupado.

Con todo, fuentes de la asociación sí reconocen que, este año, la mejora en el transporte público entre municipios ha abierto un abanico para que los trabajadores puedan buscar alojamiento fuera de Benidorm y haya posibilidad de que vuelvan a casa de un modo más asequible y en el horario que les favorece. Este hecho hace que algunos profesionales busquen vivienda o habitaciones en pisos compartidos en localidades como La Nucia o La Vila Joiosa, algo más al alcance de sus bolsillos. Aunque encontrar un alojamiento en pleno verano, de temporada, muchas veces es tarea muy complicada también en las ciudades alrededor de Benidorm.

Una decena de anuncios en dos días

"Se busca camarero/a. Que sea amable con la gente, buen camarero, atento a sus mesas, energía y ganas de trabajar y aprender". Así reza uno de los anuncios que se puede encontrar en la red para buscar profesionales que cubran puestos vacantes en Benidorm. En una de las páginas consultadas por este diario, existen una decena de ofertas publicadas en apenas dos días. En solo una jornada, cinco de ellas reclaman profesionales para la "incorporación inmediata".

Entre los requisitos sí se puede comprobar como piden experiencia e idiomas en algunos casos. Aunque muchos no especifican esta cuestión, sino solo la necesidad de que haya ganas de trabajar y aprender. Los sueldos varían de media desde los 1.300 euros a los 2.200 euros para, por ejemplo, jefes de cocina. Y las ofertas se reparten por todas las zonas de la ciudad, sobre todo las más turísticas. Entre las ofertas, jornadas completas y en algunas especifican que el trabajo es para la temporada estival. Al otro lado, el de las ofertas, es más difícil encontrar anuncios en los que sean los profesionales los que busquen trabajo.

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