Yo no sé cómo estarán los demás. Yo me paso buena parte del día leyendo los periódicos y ahora mismo tengo un lío tremendo con los posibles pactos, la investidura, las posibilidades aritméticas, la posibilidad de no pactar pero sí legislar juntos,... Y, en medio de todo esto, de vez en cuando, aparece alguna novedad sobre el caso de Rita Barberá, que le da más salero si cabe a todo este maremágnum político.

Y esta misma tarde, sale Rajoy y dice que el Rey no le ha pedido que forme gobierno, pero que él no renuncia a la investidura. No sé si entiendo bien el significado de todo esto (estoy saturada, en serio), pero éste es un vídeo fantástico y maravilloso para explicaros el movimiento vertical de hombros.

El movimiento vertical de hombros consiste en un movimiento muy rápido de uno o de los dos hombros hacia arriba. Ojo, es muy rápido, y, por tanto, inconsciente. No nos da tiempo a darnos cuenta de que lo estamos haciendo. De ahí que sea muy útil cuando se detecta, porque revela un estado verdadero de ánimo. ¿Y cuándo aparece este movimiento? Cuando tenemos dudas acerca de lo que estamos diciendo. No tengo claro lo que digo, dudo, y mi hombro o mis hombros van hacia arriba.

Y Rajoy hace varios movimientos verticales de hombros de libro.

Fijaos primero en el min. 0'28. Justo cuando dice "le dije al Rey que hoy no tenemos los apoyos, pero que vamos a esperar cómo se produce los acontecimientos...". Si os fijáis justo después de "pero" viene un movimiento vertical del hombro derecho.

Pero el movimiento vertical de hombros más bonito viene justo en el min. 0'41 cuando dice "y no renunciamos a lo largo". Hace un movimiento vertical de los dos hombros que claramente marca la duda acerca de esa renuncia a la investidura.

Ni renuncio ni dejo de renunciar sino todo lo contrario.

Puedes ver el vídeo pinchando aquí.