Los Rolling Stones aterrizaron en la tarde de ayer en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas en medio de un gran dispositivo de seguridad y a una semana del inicio de su próxima gira europea, Sixty, que arrancará en la capital española el próximo miércoles 1 de junio. Fue precisamente en junio de 1976 cuando la banda ofreció su primer concierto en España y el último fue en el año 2017 en Barcelona.

Aunque ya no están todos, tras la inesperada muerte el pasado mes de agosto de Charlie Watts, el peso y leyenda de los Rolling Stones parecen seguir intactos y así se sintió ayer a su llegada a Madrid en medio de un gran dispositivo de seguridad reservado para autoridades muy singulares. Como comentaban desde la organización de la visita, escasísimas figuras («solo el Papa») reciben en el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid un tratamiento como el proporcionado a Sus Satánicas Majestades a una semana de comenzar en la capital española la que podría ser la última gira de su historia.

Fue a las 18.30 horas cuando el jet privado en el que viajaban Mick Jagger, Keith Richards y Ron Wood, acompañados de sus familias, tomó tierra en la T4 de Madrid, escoltados por la Guardia Civil y en una zona restringida, a la que solo se permitió el acceso de unos pocos medios gráficos.

Un séquito de cinco vehículos aguardaba a los Stones ya cuando entre sonrisas aparecieron los tres por la puerta del avión, ilustrado este con la icónica lengua diseñada originalmente por John Pasche y que fue incluida por primera vez en el disco Sticky Fingers (1971). Con visera negra, chaqueta deportiva estampada y gafas de sol, el cantante fue el primero en bajar las escalerillas.

Sin declaraciones, prohibido el acceso de los redactores de esos medios, todos posaron luego brevemente, apenas tres minutos. Lo hicieron a cierta distancia de los fotógrafos y cámaras de televisión, a los que se pidió que utilizaran mascarilla por la covid-19, pese a encontrarse al aire libre.

En los próximos días no figuran planes oficiales, ni siquiera los de sus ensayos, «aunque los habrá», indican desde su promotora. Es más, el hecho de que no hayan venido solos es muestra de que se han reservado estas próximas jornadas como una visita privada para disfrutar de Madrid antes del inicio de la gira.

Será el próximo miércoles, un día antes de aquel en el que Charlie Watts hubiese cumplido 75 años, cuando el ahora trío dará comienzo a su nueva gira europea, Sixty, con la que conmemorarán las seis décadas transcurridas desde la fundación de la banda.

Esta vez es el Wanda Metropolitano, y su aforo para más de 45.000 personas, el que acogerá el primero de los conciertos de este tour, el número 24 de los que han ofrecido en España desde el primero de hace 46 años. El último fue en 2017 en Barcelona.