Los técnicos de Cultura alertan que el traslado de las damas de Elche y de Baza causaría un daño "irreparable"

Cualquier traslado de las 'damas ibéricas' del Museo Arqueológico Nacional (MAN) causaría un daño "irreparable", según los técnicos del Ministerio de Cultura. En un informe sobre el estado y los protocolos de conservación de la Dama de Elche, la Dama de Baza y la Dama del Cerro de los Santos, un grupo interdisciplinar formado por personal del museo, de la subdirección general de Museos Estatales y del Instituto del Patrimonio Cultural de España (IPCE) desaconseja rotundamente cualquier traslado de las piezas como los que periódicamente se han solicitado desde sus lugares de origen. El pasado 3 de agosto, el nuevo 'conseller' de Cultura valenciano por Vox, el extorero Vicente Barrera, reclamó el retorno de escultura hallada en Elche hace 125 años por "sentido común".

La Dama de Elche

El informe destaca "el estado de vulnerabilidad del material constituyente de la escultura", con presencia de sales y pérdidas de policromía y aplicaciones decorativas, descohesión respecto al soporte pétreo de estas y productos ajenos al material original. Los autores señalan que "cualquier variación en los parámetros ambientales derivada de un posible traslado de la obra puede desencadenar mecanismos de alteración física", con "graves consecuencias" por la "aparición de nuevos ciclos de solución y recristalización de sales" que supondrían "un riesgo de pérdidas en la superficie", tanto de material pétreo como de los escasos restos de policromía conservados. El riesgo de "un traslado externo" se riesgo sería "muy alto" ya que la escultura "se encuentra actualmente en un estado de equilibrio en relación al medio en el que se conserva muy delicado".

En 2005, recuerda el informe, ya se reunió una comisión de estudio realizado por el IPHE sobre la policromía, soporte, costras y depósitos superficiales, por el Centre de Recherche et de Restauration des Musées de France (C2RMF) (estudio de policromía) y el Instituto Eduardo Torroja del CSIC (pigmentos, recubrimientos, piedra y estudio de los restos de ceniza de huesos del hueco posterior de la escultura), en el que se han basado las anteriores negativas al traslado de la pieza.

Para analizar la escultura se examinaron "17 puntos representativos de deterioro" y 20 puntos de muestreo de sales solubles.

La Dama de Baza

Según el informe, "las variaciones en las condiciones higrométricas en el entorno de la dama desencadenarían un complejo proceso de disolución y cristalización de sales sulfatadas, que comprometerían el inestable proceso de conservación de la policromía", además de "mecanismos de alteración física". Las pérdidas de estratos que se producirían conllevarían "una pérdida irreparable para el conocimiento de este excepcional bien cultural y de la cultura ibérica en su conjunto debido fundamentalmente a que esta pieza conserva en gran medida la policromía original", en un estado delicado ya que se aplicó sobre una capa de preparación de yeso. Concluyen los expertos que las consecuencias de un traslado externo, "sea cual sea el medio", "comprometerían la integridad de esta obra tan significativa para el Patrimonio Histórico Español", ya que se trata de "un 'unicum', al ser una pieza completa y policromada, hallada en contexto arqueológico, en su tumba subterránea y con su ajuar original".

El informe corrobora "las pérdidas antiguas generalizadas de policromía, así como la migración de los pigmentos a través de la costra, formando un conjunto inseparable y con potencial riesgo de desprendimiento".

El estudio recuerda, para insistir en su fragilidad, que "la escultura se encuentra fragmentada (cabeza, alas del trono, pata posterior izquierda del trono y apoyabrazos derecho) y presenta numerosas pérdidas, algunas de cierta entidad.

La Dama del Cerro de los Santos

En este caso, el problema está en las mismas características del material en el que se labró. Una caliza que presenta "escasa dureza y fragilidad", con pérdidas puntuales "ern las partes más destacadas, como ángulos, bordes, manos y el basamento". Aun así, de las tres piezas es "la que se encuentra en un estado de mayor estabilidad y menor contenido salino, lo cual permite su exposición al público fuera de vitrina".

La labor del grupo de trabajo, creado en febrero de 2022, ha tenido tres fases. La primera, recopilar y estudiar la documentación relativa a las esculturas. La segunda, un estudio científico-técnico mediante "la adquisición de imágenes y realización de análisis" para fijar "el establecimiento de una metodología de trabajo para el seguimiento del estado de conservación" y finalmente la implantación de protocolos de seguimientos. Durante el proceso se han tomado micromuestras que han sido almacenadas para que futuros estudios puedan realizarse sin volver a extraer material de las esculturas.

La conclusión final del informe, para el conjunto de las tres piezas, es el siguiente: "Los estudios realizados en estas esculturas señalan la no conveniencia de variaciones respecto a su entorno actual, desaconsejando, en consecuencia, su salida del MAN".