Una comedia con sello alicantino abre el Festival de Cine de Alicante

El alicantino Ángel Puadoha participado con casi todas sus películas anteriores en el Festival de Cine de Alicante, pero nunca ha ganado un premio en casa. Ahora aspira a lograr "al menos el del público" con Bruno, una comedia "disparatada y desequilibrada", indica el director, que se proyecta este martes a las 21.15 horas en los cines Kinépolis y abre la sección oficial de largometrajes a concurso.

Bruno nace "de una obra de teatro que hicimos los tres hace unos años, cambiamos un poco el texto, lo actualizamos y le dimos un poco de ritmo, la sacamos de la habitación, incluimos algunos personajes secundarios y al final ha quedado una película bastante divertida", confiesa el director, guionista, montador y productor, un adalid del cine independiente de bajo presupuesto y financiado de su bolsillo, que pone el foco en la calidad de los textos y en la interpretación de los actores.

La cinta está protagonizada por los actores Fele Pastor y Paco Pando, que retratan a un paciente (Pastor) y su psiquiatra (Pando), aunque los roles no están tan definidos como parecen, ya que el terapeuta "está pasando una época mala y decide irse unos días a tomarse un respiro y con las maletas hechas recibe a su último paciente, que le desequilibra todo", indica Pando, al que Pastor "acaba traspasándole sus problemas y parece que el que necesite ayuda sea el psiquiatra". "En una hora le arruina la vida a alguien que cree que llevaba una vida normal y sencilla", acotan director y actores, que subrayan el toque cómico de la historia en este duelo de personajes.

La película ya ha participado en una decena de festivales independientes nacionales e internacionales y ha ganado premios -el último, el pasado mes de marzo al mejor largometraje extranjero en Indepentarn Festival de Francia- y ya ha sido "probada" con el público: "Los gags funcionan muy bien, unas risas tapan a otras y la gente se divierte mucho. Hay que verla en cine porque la risa se contagia", comentan los tres.

Los retos

Uno de los retos era sacar la obra de un escenario -una casa prestada en el centro de Alicante- "para que respirara" y por ello rodaron todos los exteriores, salvo el MUA, en un radio cercano: la Explanada, la plaza Gabriel Miró, la calle San Francisco, el paseo del Puerto, "con todos los inconvenientes del cine independiente de rodar en la calle sin permisos -cuando no te interrumpe el ruido de una fuente, lo hace un pasodoble de Hogueras- donde tienes que ir solucionando problemas de forma continua", señala Puado.

El otro desafío era rodar la película en dos días y medio, el tiempo libre de un fin de semana largo, con un texto de cien páginas para cada actor. "He rodado un corto de seis minutos en cuatro días y esta película, de 74 minutos, la hemos hecho en tres", se queja entre bromas Fele Pastor, que ha trabajado en casi todo lo que ha hecho Ángel Puado y presenta también un corto suyo en la sección oficial de cortometrajes, Sola, mientras que Puado lleva otro, Infancia, a la sección Alicante Cinema.

Pando, actor de teatro -es director de la compañía Epidauro Teatro- reconoce que al principio se sentía "un poco extraño en el rodaje, era un puzle raro, y no entendía por qué se cortaban las escenas", bromea, pero la experiencia le ha parecido "muy interesante".

Además de Bruno, Puado está detrás de los largometrajes El perro naranja, 9 bares, Mirando al mar y Los días de la noche, y de una veintena de cortometrajes. Su próximo proyecto será una coproducción con una productora andaluza, Entre mesas,con cuatro historias de distintos géneros, que se rodará en la ciudad de Sevilla el próximo mes de septiembre.

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