Empieza la liga del Eldense

Cinco salidas y cuatro puntos sumados en ellas. Balance negativo: tres derrotas, un empate y un triunfo a domicilio, el del primer día del curso en Cartagena, que ya queda lejos. El Deportivo acumula un mes sin ganar y está solo un punto por encima de la zona de descenso. Toca tomar impulso. La liga del Eldense se juega en casa, la liga que le tiene que dejar al final del curso dentro del fútbol profesional, y esa empieza esa empieza este domingo en un horario insólito: las dos de la tarde. Es muy probable que en su centenaria historia, no haya disputado nunca un encuentro oficial mientras el país almuerza.

El Eldense hace un balance positivo del inicio de temporada

El Eldense va a jugar tres encuentros como local en las próximas cuatro jornadas, las dos primeras de manera consecutiva frente a Real Oviedo y Real Valladolid, y culminará en el Nuevo Pepico Amat con la visita del Elche el 15 de octubre. Tres citas para hacerse fuerte en la ciudad zapatera aunque la entidad de los rivales, históricos todos, no les convierta en los mejores enemigos posibles para engrosar el capítulo de triunfos, que se reduce a dos en las siete primeras fechas.

Si el Eldense es capaz de reeditar la fuerza, el control y la intensidad que exhibió frente al Eibar, en el regreso del fútbol al Nuevo Pepico Amat después de consumar el ascenso en junio, el conjunto de Fernando Estévez albergará opciones serias de poner distancia con la zona de abajo.

El Eldense está sujeto a una anomalía fabulosa

Por contra, si da continuidad a la debilidad mostrada en el último mes de Liga, entonces tendrá un mal pronóstico. Los azulgranas solo se ha quedado una vez sin recibir gol en lo que va de campaña. Después, el promedio es poco halagüeño: más de dos tantos encajados por contienda. En una coyuntura así, solo un porcentaje de acierto inusual para un recién ascendido (con el séptimo límite salarial más bajo) puede evitar encadenar tropiezos.

Hasta el pasado sábado era así. El Eldense firmaba el mismo grado de eficacia que el líder de Primera División, el Barça, y más alto que el del Real Madrid. Terminaba celebrando uno de cada dos disparos entre los tres palos. Sin embargo, esa es una cualidad que no se puede prolongar mucho en el tiempo. En el Ciutat de València, frente al Levante, tiró un par de veces en todo el partido, así que, o frena la sangría de goles en contra o el futuro se nubla.